Nacionales | 15 May Los presidentes de Paraguay, Fernando Lugo, y de Uruguay, Tabaré Vázquez, ratificaron su voluntad de concretar y potenciar alianzas estratégicas entre los países pequeños de Sudamérica, en una declaración conjunta antes de terminar una visita oficial del mandatario uruguayo.
“Ratificamos la necesidad de concretar y potenciar alianzas estratégicas como Urupabol (Uruguay, Paraguay, Bolivia)”, según una declaración conjunta que ambos mandatarios firmaron ayer antes de finalizar una visita relámpago de menos de 24 horas de Vázquez. Ambos gobernantes alentaron la integración energética, destacaron el proceso de integración regional por medio del Mercosur y resaltaron la defensa de los principios del respeto a la soberanía y los derechos humanos.
En la declaración de protocolo, Vázquez expresó el pleno apoyo de Uruguay al gobierno de Fernando Lugo. Vázquez asistió a las celebraciones por el 198° aniversario de la independencia paraguaya.
En breves declaraciones a periodistas, Vázquez reiteró su voluntad de reflotar un antiguo proyecto de integración regional entre los países pequeños y de menor desarrollo de la región, el llamado Urupabol. El grupo fue creado en 1963 e inicialmente trabajó como un bloque comercial regional que posteriormente se transformó en un organismo que proyectó una mejor utilización de las vías naturales mediante la creación de una flota mercante multinacional.
Vázquez destacó su deseo de promover una mayor cohesión en el Mercosur, al tiempo que consideró “fundamental” la integración energética, en momentos en que nuestro país sufre una crisis por la sequía que redujo el volumen hidroeléctrico de sus represas.
Lugo y Vázquez asistieron a un desfile militar frente al Palacio de Gobierno y al Te Deum oficial en la catedral metropolitana. En un inesperado incidente, poco después del desfile, ambos mandatarios escucharon abucheos de funcionarios en huelga de la Administración de Puertos. Los presidentes escucharon las manifestaciones de reprobación cuando visitaron una embarcación uruguaya estacionada en el puerto de Asunción. Lugo y Vázquez permanecieron pocos minutos en el lugar y se retiraron entre los gritos hostiles de los manifestantes.