Nacionales | 16 May Ya ni se lo piden
La muerte de dos adolescentes en un enfrentamiento entre hinchadas caló hondo en la opinión pública y reavivó el debate respecto a los problemas de inseguridad, pero el desempeño y las actitudes de la ministra del Interior Daisy Tourné ponen “los pelos de punta” a la oposición y generan –aunque no manifiesta-- preocupación en el seno del gobierno. La verborrágica secretaria de Estado repartió hábilmente las responsabilidades de las muertes en el conjunto de la sociedad y la oposición respondió tildándola de “frívola” e “incompetente”. Ahora, las principales figuras de los partidos tradicionales apuntan directamente al presidente Tabaré Vázquez y renuncian a la posibilidad de utilizar mecanismos parlamentarios para “cortarle el paso” a Tourné.
Según “El País”, Jorge Larrañaga rechazó enfáticamente las reflexiones de la ministra respecto a que la actual situación de inseguridad derivará inevitablemente en la muerte de más jóvenes. “Eso es admitir su propia ineptitud”, opinó el líder de Alianza Nacional, aunque también manifestó que no solicitará la renuncia de la ministra.
“Ya no lo pedimos más. Lo hicimos hace más de un mes y ¿qué pasó?”, preguntó.
“El problema de la seguridad es gravísimo y supone un fracaso del Frente Amplio porque no ha podido solucionarlo”, añadió.
El líder de Vamos Uruguay, Pedro Bordaberry, optó por apuntar sus baterías contra el presidente Tabaré Vázquez, a quien responsabiliza de mantenerse inconmovible ante las permanentes solicitudes de renuncia dirigidas a Tourné.
“Pedimos la renuncia de la ministra hace siete meses y el presidente la mantuvo, pero no queremos reiterar el pedido porque van a decir que estamos utilizando el tema políticamente”, reclamó.
Controversias alcoholizadas
Aunque falta menos de mes y medio para las elecciones internas, el tenor de la campaña ya alcanza su punto más alto y el grado de exaltación de algunos actores políticos demuestra que la instancia preelectoral dejará heridas difíciles de borrar. Según un informe divulgado recientemente por “El Observador”, en los últimos días los ataques personales recrudecieron y abarcaron temas como la corrupción y supuestas adicciones.
El dirigente del Pit-Cnt e integrante del Partido Comunista, Juan Castillo, especuló sobre las verdaderas causas del accidente que mantuvo inactivo por varios días al ex presidente de la República, Luis Alberto Lacalle. El sindicalista cree que el tropezón del Lacalle fue propiciado por consumo excesivo de alcohol.
“Hay políticos que usufructúan (sic) un accidente doméstico. Si fuéramos nosotros, nos hubieran preguntado qué tomamos. Y lo hacen ver como que fue un acto de familia”, afirmó Castillo. Otro caso de intercambio de agravios fue protagonizado por el ex vicepresidente Gonzalo Aguirre y el líder del MPP, José Mujica. El nacionalista comparó al “Pepe” con Hitler y éste le respondió irónicamente, aunque aludiendo claramente a una supuesta adicción.
“El doctor Aguirre se debe haber levantado algo dormido y en lugar de tomar el whisky se tomó el perfume, y por eso le salió ese exabrupto”, afirmó.
“Guante negro”
La pirotecnia verbal no solo se utiliza para menoscabar a los demás partidos, también suele ser eficaz para socavar las aspiraciones de los propios correligionarios. “El Observador” recordó que desde el comienzo de la campaña preelectoral, los frentemplistas han intentado mantener a sus “candidateables” en buenos términos. Sin embargo “los palos” no se han hecho esperar y el circunspecto Astori no ha dudado en calificar las propuestas de José Mujica como poco “serias” y poco “coherentes”.
El estilo “nuevoespacista” también molestó a Marcos Carámbula, quien se manifestó contrariado con los pegotines adosados recientemente a los contenedores de basura en los cuales se lee la siguiente frase: “no tires tu voto, votá a Astori”. El líder del Nuevo Espacio, Rafael Michelini, repelió las críticas de Carámbula con otra alusión al alcoholismo.
“Marcos se dio por aludido. Notoriamente es una referencia a no darles el voto a los blancos y colorados. Me da la sensación de que en la medida en que estas declaraciones ocurrieron en una cena, es otro que se tomó el perfume”, opinó Michelini. El temido “guante negro” ya se instaló en la interna frenteamplista.
Si es Lacalle, mejor
Lo dice Larrañaga y lo ratifican los propios frenteamplistas: el ex presidente de la República Luis Alberto Lacalle, es el candidato a quien el Frente Amplio desea enfrentar en las elecciones nacionales. Hasta el momento, casi ningún integrante de la coalición había admitido esta “preferencia”, pero en una entrevista cedida a “La Diaria” el director de la OPP, Enrique Rubio (Vertiente Artiguista) admitió que con el líder de Unidad Nacional las diferencias son “más nítidas”. “Con Lacalle son más nítidas las diferencias programáticas y es preferible que el Uruguay se ubique y tenga discernimiento sobre trazos gruesos, nítidamente diferenciados en dos proyectos de país”, afirmó.