Locales | 31 May Respecto a la contrapartida negativa que significa para el Interior el déficit en logística y servicios respecto a la radicación de empresas en Montevideo, el ministro de Economía y Finanzas señaló que “es cierto, pero se ha avanzado, y por ejemplo, a través de la Corporación Nacional para el Desarrollo, la corporación vial, lo que ha sido un proceso que está dando sus frutos ahora con la corporación ferroviaria, deriva en que ha habido un incremento importante del sector público en infraestructura”.
“Claro, falta muchísimo, porque el Uruguay tiene el viejo concepto de las vías férreas que dejaron los ingleses. Eso tiene que ser quebrado, y el concepto similar en carreteras, con el centralismo de Montevideo, sin lugar a dudas, y además la infraestructura es cara”, puntualizó.
Sostuvo asimismo que “cuando un gobierno anuncia que va a hacer mucha obra los precios suben automáticamente. Eso ha pasado y me consta en distintas áreas, como el rubro vial y el ferroviario, con una región que estaba también trabajando de manera importante”.
“No había mucha empresa de la región para venir acá, aunque ha venido alguna grande brasileña a trabajar, cosa que ayuda a la competencia y a que bajen los precios. Pero el incremento de obra de infraestructura que ha habido ha sido importante, aunque evidentemente no alcanza. Hay que seguir, específicamente en zonas como el Este, con la conectividad de los puertos, que es absolutamente fundamental. Hemos estado pensando fuertemente en la conectividad de ferrocarriles con algunos puertos como el de Nueva Palmira, pero ante los costos que implican esas inversiones a veces no da la ecuación económica”, explicó.
“Hay mecanismos por los que el país tiene que seguir transitando, como los de las asociaciones público-privadas, los mecanismos de concesión, que son válidos cuando el Estado no tiene todos los recursos para hacer la infraestructura que necesite. Ahora, creo que debe mirarse a mediano y largo plazo estas grandes inversiones que están viniendo. Ahora se acaba de confirmar lo de Stora Enso y Arauco, que es una muy buena noticia, lo que da prácticamente un cien por ciento de posibilidades de que establezcan una nueva fábrica en el Uruguay. Y si se confirma la de Portucel, hay que continuar adelante para a partir de eso generar la infraestructura que se necesita”, evaluó el secretario de Estado.
“Otro aspecto muy importante es aprovechar el derrame de esas grandes inversiones en el país, es decir trabajar para que las pequeñas y medianas empresas uruguayas se capaciten y preparen o se creen para ser proveedoras de las grandes inversiones en este como en otros rubros, caso del rubro minero. Creo que podemos llegar a descubrir que en pocos años quizás seamos un fuerte país minero, en extracción de hierro y hasta quizás petróleo, cosa que todavía no sabemos con certeza, pero existen indicios de que así podría ser”, sostuvo el ministro.