Nacionales | 30 May El gobierno definió medidas de ahorro energético en dependencias estatales. El ministro de Industria, Daniel Martínez, afirmó que el problema “no es de abastecimiento”, sino de costo. Las medidas de ahorro continuarán los lineamientos definidos en 2008. Por el momento se descarta un aumento de tarifas y restricciones en el sector privado. Martínez enfatizó que el uso responsable de la energía es un compromiso que debe asumir todo el país. El Ministerio de Industria, Energía y Minería definió en la víspera, junto al directorio de UTE y representantes de todas los organismos del Estado, comenzar con ahorros voluntarios en el sector público. El ministro señaló que el objetivo es asumir el compromiso de hacer uso responsable de la energía, no sólo por parte del Estado, sino del conjunto de la población. Las pautas de uso eficiente de la energía incluyen, por ejemplo, el correcto manejo de los aparatos de aire acondicionado, encendiéndolos sólo cuando es necesario  y manteniéndolos a temperaturas adecuadas, así como el uso de aparatos con termostatos que regulan automáticamente la temperatura, y mantener encendidas las luces y equipos sólo el tiempo necesario, especialmente en los horarios de mayor consumo.
Si bien por el momento la demanda de energía es abastecida, el país paga un precio alto por la misma, porque en su mayor parte es importada o generada en base a gasoil, fuel oil, viento o biomasa. Son varias alternativas muy buenas pero entre 5 y 15 veces más costosas que la energía hidráulica, dijo el ministro, agregando que en estos momentos se gastan mensualmente más de 30 millones de dólares adicionales a lo previsto. Durante 2008, los ministerios llegaron a ahorrar globalmente entre 7 y 8%, que implica el cumplimiento del compromiso asumido.
Consultado sobre si habría alguna modificación en las tarifas de energía eléctrica, Martínez confirmó que continúa realizándose el seguimiento de los precios del petróleo y el dólar por parte de Ancap. Martínez también fue consultado sobre el consumo de combustibles, confirmando que durante los últimos tres años ha crecido el uso de las naftas entre un 12 y 13%, en tanto el consumo de gasoil ascendió entre el 2 y el 4%. Puntualizó que hay mucho para hacer en materia de eficiencia energética. Por ejemplo, educación en el manejo y desarrollo del sistema de transporte multimodal, utilizando y potenciando el uso del transporte fluvial y el ferrocarril, en forma conjunta al transporte carretero.