SARANDÍ DE NAVARRO

Locales | 05 Jun Es un lugar de cruce, pero el tránsito es intermitente. Está habitado por un poco más de trescientos pobladores. La tranquilidad de la que goza el pueblo es apenas sacudida por el bullicio de los niños, que durante el recreo dan rienda suelta a una improvisada diversión escolar. Es que el patio principal del establecimiento está ubicado hacia el camino principal que atraviesa el pueblo de punta a punta. Cómo en otros tantos lugares similares, la escuela es un referente. Sarandí de Navarro se encuentra enclavado sobre una dura planicie de basalto superficial y está ubicado al sureste de Paysandú y a unos 210 kilómetros de Fray Bentos. Si bien el tráfico de transporte de ganado interrumpe de tanto en tanto la monotonía, el silencio domina los campos.
El aire de la mañana estaba particularmente helado. El frío se hacía intenso y el viento parecía lastimar nuestros pómulos. El otoño se muestra agresivo, más de lo normal, aunque el cambio drástico de temperatura no es impedimento para encarar la jornada con un nuevo destino hacia el interior profundo. En esta oportunidad nuestra ruta de viaje nos lleva a descubrir territorios dominados por palmeras y particularmente por corredores de eucaliptos. El estrecho y sinuoso camino vecinal serpentea entre cañadas y pequeños arroyos, lo que hace más atractivo al viaje. Cada imagen una fotografía, y cada registro un pequeño recuerdo. Se consumen varios kilómetros y ocasionalmente el cruce de una tropa da cierto movimiento a la monótona escenografía. Un paisano que saluda y otro que apura el tranco. Las huellas frescas de otros vehículos y algunos charcos revelan que la noche anterior las lluvias visitaron la zona.
Al llegar a este centro poblado y tras un breve recorrido por sus calles internas visitamos la Escuela Nº16. A ella concurren unos cincuenta y cuatro alumnos, de los cuales cuarenta y tres en primaria y once en secundaria. La escuela tiene séptimo y octavo grado de liceo rural. Según su maestro director, Javier Do Santos, “los gurises tienen buen nivel de escolaridad”. Como en otras escuelas, tienen sus computadoras XO del plan Ceibal, pero como en la mayoría del territorio rural, aún no tienen conectividad.
Do Santos nos relató parte de su experiencia como director de la Escuela Nº 16 de Sarandí de Navarro. Aseguró que conoce bastante del territorio rural, porque comenzó en escuelas pequeñas. “Desde hace trece años que ando en las escuelas rurales. Estos territorios tienen sus cosas buenas y malas. Pero, las cosas malas no parten de estar incómodo o mal con la gente del lugar, sino que pasa por la lejanía y las distancias que uno tiene a nivel personal con sus respectivas familias. Eso sería la parte negativa de ser maestro rural, porque la parte comunitaria y social es bárbara. En estos escenarios no hay grandes problemas, no se pasa mal, el vecino se muestra muy solidario. Contribuye con la escuela. En este establecimiento existe una comisión de fomento que es muy huraña. Pero uno trata de mostrarse tal como es y todo resulta más fácil”.
Si bien en los campos adyacentes hay mucha actividad forestal, en Sarandí de Navarro esta modalidad de cultivo no es predominante. Existen emprendimientos familiares y producción ganadera. Pequeños apicultores y algunas quintas que conservan cierta cultura de una modalidad que en otros lugares se ha perdido. Por su parte el nivel económico de los pobladores es de medio bajo.
En cuanto a la conformación de las familias, Do Santos dijo que “en otros poblados sobresale mucho el matriarcado, pero aquí las familias básicamente están bien constituidas, manteniéndose bien la familia tipo. Hay excepciones, pero la mayoría de los niños viven con sus padres”.
En cuanto al comportamiento y nivel educativo de sus alumnos, Do Santos afirmó que “lo más flojo quizás sea el tema de conducta.
El rendimiento es muy bueno, casi no hay niños con bajas calificaciones”.
En Sarandí de Navarro habitan poco más de trescientos pobladores. Hay dos complejos Mevir, que fueron construidos hace unos diez años. Según el maestro, el origen del nombre del poblado “es por el arroyo Sarandí y la cuchilla de Navarro”. Una sola línea de ómnibus hace el servicio dos veces a la semana conectando con Young y Paso de los Toros.
Algunos se van a estudiar a Fray Bentos o a Paso de los Toros, pero lo puede hacer soloaquel que tiene familiares.
En el pueblo funciona una oficina de Correos, policlínica, comisaría y un salón comunal, en el que se instaló un centro MEC en noviembre de 2008 con seis computadoras, donde los chicos solo van a jugar, porque no está atendido. Solo hay una encargada que cuida. En este lugar la diversión se resume a encuentros futboleros, particularmente el fútbol femenino.
El equipo viene invicto y las chicas están orgullosas de conservar esa condición deportiva.