Deportes | 07 Jun Todo se hace cuesta arriba. Si alguien apostaba por una victoria brasileña, se lo podía mirar medio extraño pero era una posibilidad. Pero si alguien afirmaba que además de ganar Brasil golearía 4 a 0 a Uruguay en el mismo Estadio Centenario en el que hacía 33 años que no ganaba, directamente hubiera despertado algo más que una sonrisa.
Pero fútbol es fútbol y cualquiera que enfrente a Brasil sabe que no puede dar ninguna ventaja, más allá de que el fútbol que desplega esté lejos del juego bonito.
Uruguay llegó entonado a esta 13ª fecha de las eliminatorias, y terminó con la soga al cuello, sabiendo que hasta puede peligrar el quinto lugar en la tabla de posiciones.
Pero pese a esa goleada no puede decirse que Uruguay jugó mal. Y no es contradecir el resultado. Porque Brasil llegó un par de veces con claridad al arco celeste, y anotó dos goles. Pero sería el primero, un pelotazo al arco sin ningún tipo de pretensión que descolocó totalmente a Viera --que se comió un gol increíble--, el que cambiaría el rumbo del partido.
Porque pese a que Uruguay trató de no desesperarse y dominó el trámite llegando a inquietar a un imbatible Julio César, Brasil marcó el segundo gol aprovechando un doble error de la defensa y una salida magra de un arquero que se quedó con las manos vacías.
Antes y después los celestes habían dominado, al punto que el equipo de Oscar Tabárez desperdició al menos dos o tres chances claras que le hubieran permitido hasta pasar al frente en el partido.
Pero aquel primer gol, producto de un grueso error, fue fatal y cambió totalmente el partido. Y si era complicado estar 1 a 0 abajo a pocos minutos de iniciado el partido, un 2 a 0 era sellar el compromiso.
Más allá de que Tabárez cambió y apostó a sumar en ataque, aunque sabiendo que dejaría espacios en la mitad de la cancha; y esos temores se confirmaron. Brasil defendió bien y Luis Fabiano (que después se iría expulsado) volvió a pegar a poco de iniciado el complemento, para liquidar las cosas, mientras Uruguay cometió errores en el fondo en su afán de volcarse en ataque, aunque en vano.
Uruguay ya había pecado a la hora de definir frente al arco rival en el primer tiempo. Y todo se hizo cuesta arriba, más allá de que pudo llegar ante un arco invulnerable, mientras del otro lado Kaká, que guió de la mejor manera a su equipo con la pelota en los pies en los momentos justos, anotaba el cuarto gol, de penal.
Los celestes se complicaron en la tabla, pero deberán dar vuelta rápidamente la página si es que el miércoles se quiere derrotar de visita a Venezuela, sin el suspendido Eguren y sin el expulsado Maxi Pereira.

URUGUAY 0 BRASIL 4
Escenario: Estadio Centenario. Público: 52.000 personas. Arbitros: Saúl Laverni, Gustavo Esquivel y Ariel Bustos (argentinos).
Uruguay: Sebastián Viera; Maximiliano Pereira, Carlos Valdez, Diego Godín, Martín Cáceres; Jorge Martínez, Diego Pérez (46’ Sebastián Abreu), Sebastián Eguren, Alvaro Pereira (65’ Alvaro Fernández); Luis Suárez (75’ Edinson Cavani) y Diego Forlán. DT: Oscar Tabárez.
Brasil: Julio César; Daniel Alves, Lúcio, Juan, Cléber; Gilberto Silva, Felipe Melo, Elano (65’ Ramires), Kaká (85’ Julio Baptista); Robinho (85’ Josué) y Luis Fabiano. DT: Dunga.
Goles: 11’ Daniel Alves, 35’ Juan, 52’ Luis Fabiano, 74’ Kaká (de penal).
Expulsados: 65’ Luis Fabiano, 86’ Maximiliano Pereira.
Tarjetas amarillas: 20’ Luis Fabiano, 58’ Carlos Valdez, 90’ Sebastián Eguren.