“EL ESTADO NO HACE TODO BIEN”

Locales | 19 Jun Sobre la situación de la niñez y la adolescencia, el ex director del Instituto Técnico de Rehabilitación Juvenil (Interj), Mateo Méndez, afirmó a EL TELEGRAFO que “la problemática es compleja, pero creo que siempre se encuentra gente e instituciones que tengan ganas de seguir aportando a los adolescentes y jóvenes. Mientras haya instituciones que se ocupen de ellos, estamos bien”.
Sin embargo, a su juicio “como país seguimos teniendo un debe, hay que achicarlo dadas las situaciones que son cada vez más complejas”. Dijo que esa complejidad se ve “en lo social, lo familiar, hay ofertas más complejas para los adolescentes y jóvenes. Y en ese mundo más difícil tenemos que ser creativos en las propuestas para ellos. Y que además de creativos, debemos ser serios”. Argumentó que hay que brindarles algo “que tenga que ver con la vida y los prepare para ella, y no solamente para entretenerlos un tiempito mientras van creciendo, sino que le demos algo que les de herramientas para encarar su futuro, su proyecto de vida”.
CAMINOS NO “FORMALES”
Consultado sobre qué haría para cambiar esto si estuviera a su alcance, dijo que “hay que seguir insistiendo de que si bien todo lo que tiene que ver con el sistema educativo y la formación intelectual es importante y creo que hay que seguirla haciendo, también nos tenemos que plantear si el sistema educativo formal es el único camino que habilita para seguir otras propuestas y estudios o caminos de profesionalización que no sean necesariamente los seis años de estudios o de liceo”.
“Hay otro camino que tenemos que empezar a recorrer con otra gente en temas de educación no formal, propuestas serias, porque a veces suena que lo no formal es una cosa que no es formativa. Pero hay que seguir caminos para que el adolescente sienta que hay una preocupación no solamente en lo intelectual y en la preparación del sistema educativo, sino también seguir abriendo espacios, que por ahí vamos a encontrar otras soluciones nuevas”, agregó.
HAY QUE SUMAR ESFUERZOS
En cuanto a qué podría hacer el Estado para cambiar esta situación, sostuvo que “para cualquier goberno, debería seguir descubriendo la riqueza que el país tiene en cuanto a organizaciones con trabajos que se están haciendo en serio. El país tiene muchas organizaciones sociales, culturales y de otro tipo que están muy preocupadas por el trabajo con los adolescentes. Y creo que hay que sumar esfuerzos. Valorar el esfuerzo que las organizaciones están haciendo, y en ese valorar también integrar y sumar. No da para más seguir insistiendo en divisiones y restar, creo que hay dos signos importantes, que son sumar y multiplicar, y hacerlo sin creernos que tenemos toda la verdad”. Dado que el INAU no da abasto, y que estarían esas otras organizaciones que sí podrían cubrir necesidades de los adolescentes, el padre Méndez aseguró que “hablando del INAU, en el tema concretamente de los infractores, hasta que no corrijamos la ley solamente el INAU va a ser el encargado de tener los menores infractores con medidas privativas de libertad”. Para el sacerdote, “pueden haber instituciones privadas que pueden hacer un trabajo muy bueno también. Por eso digo que hay otro filón para abrir, y hay que convencerse que con las cosas que se han ido haciendo hasta ahora, parece que el resultado no es bueno”.
EL ESTADO NO TIENE
TODAS LAS RESPUESTAS
Sugirió así que “usemos la inteligencia para buscar otros caminos junto con otros. Han habido a nivel del Estado, de este gobierno y de otros anteriores, que se han sentado a sumar esfuerzos. Creo que hay que seguir en eso, no creerse que por ser Estado o ser gobierno tenemos todas las respuestas. Hay que seguir sumando esfuerzos”.
Dada su preocupación por el tema de los jóvenes, y preguntado sobre en qué está ahora, Mateo Mendez indicó que “estamos armando proyectos sociales a nivel de salesianos”. Señaló que “todavía está en pañales, faltan algunas definiciones, pero es social, educativo y laboral” y tiene como protagonistas a los adolescentes “que están en la línea. Si podemos agarrarlos antes de la línea, mejor. Si está del otro lado, el menor infractor que tiene una situación con medidas sustitutivas al encierro, va a estar con su familia y con nosotros”. Consultado sobre cómo se financia esa actividad, afirmó que “el dinero no siempre es el problema, creo que antes que eso están las personas que van a trabajar en el proyecto, y no solamente gente que tenga formación intelectual sino también la práctica, la experiencia del contacto con el adolescente, que es muchas veces las dificultades que tiene el INAU con el manejo de los infractores. No siempre el trabajador ha tenido contacto con adolescentes, entonces se encuentra en desventaja, y por eso pasa lo que pasa”, afirmó.
MODIFICAR LA LEY
La ley establece que el INAU es quien debe hacerse cargo de los menores infractores, y Mateo entiende que “nos ha llegado que alguna gente de los partidos políticos están en eso de plantear la modificación de la ley, pero además hay que separar los infractores del INAU”. El sacerdote entiende que el INAU debe dedicarse a los otros casos de niñez y adolescencia con problemas, y que el caso de los menores infractores “tenga su propio futuro, que puede ser un ente autónomo, descentralizado, habrá que inventar y crear. Y que haga convenios con instituciones privadas”.
Con un ejemplo deportivo, dijo que “el partido hay que jugarlo entre todos, no decir que solamente el Estado debe encargarse de los infractores”. Precisó que por ejemplo “en otros países, no muy lejos de acá, hay instituciones privadas que tienen a su cargo menores infractores y el trabajo es muy bueno. Así como miramos otras cosas en otros países, tenemos que mirar este tipo de propuestas y decir que si nosotros no hemos dado en el clavo con la rehabilitación de los adolescentes, tenemos que reconocer que no estamos y tenemos que aprender con otros, aunque sean privados”. Dijo que “en este país, parece que todo lo que venga de privados da una especie de escozor o alergia. Son cabezas estatistas, pensando que el Estado lo tiene que hacer todo porque lo hace todo bien, y está probado que no es así, no sigamos insistiendo en el tema. Seamos lo suficientemente humildes, reconozcamos que hay otra gente que lo puede hacer tan bien o mejor que el Estado, aunque tenga menos recursos, probablemente”.