Edila Nilda Belvisi

Locales | 21 Jun La edila Nilda Belvisi había planteado sus dudas en cuanto a que fuera aprobado un decreto sobre las responsabilidades de los dueños de animales sueltos, o aquellos de razas peligrosas que -aún con elementos de contención- muerden a las personas. Hoy ella entiende que urge la puesta en práctica de la ley nacional. “Hay que enfrentar situaciones, con una reglamentación clara y decreto u ordenanza departamental, lógicamente contemplando lo que la Ley 18.471 establezca para ver cuáles podrán ser las competencias de acción. Se impone que esto suceda lo antes posible, porque si no vamos a permanecer otra cantidad de años viviendo las circunstancias actuales”.
Considera que “la ley tiene muchos artículos que pueden ser aplicados y si el Ejecutivo Departamental quiere aplicarla hoy, ella está vigente. Por lo tanto puede accionar y decir que ‘en el artículo tal o cual’ sobre los paseos públicos se dispone determinada cosa. Es más, se le debe aplicar porque es una ley. Pero ocurre que en el Uruguay en general asistimos a un hecho: está prácticamente todo legislado pero la deficiencia radica en la aplicación de las leyes”.
Responsabilidad
de los dueños
“En la ley se focaliza la responsabilidad de quienes tienen animales -añadió Belvisi- en un texto bastante largo en el que se busca establecer no solo los controles, sino también las actitudes que deben tener dichas personas. Hay algunas que se deben subrayar: en el capítulo primero, artículo noveno, habla de ‘no abandonarlos ni dejarlos sueltos en lugares públicos de libre acceso’. Esto, excepto de aquellos autorizados para tales fines como puede ser el caso de una persona no vidente con su perro adiestrado. Pero es cierto que establece algunas pautas que a mi entender son muy importantes. Los perros sueltos en la calle, al cabo, son una de las mayores preocupaciones de la gente”. “También cita a las razas más peligrosas, animales que no solamente deben ser llevados con correa sino con bozal. El miércoles, justamente, aquí en Paysandú pasé al lado de un señor que llevaba un perro de una de esas razas potencialmente peligrosas y no le había puesto ese elemento de protección. Creo que estos puntos, en definitiva, son importantes para recalcar ya que la ley establece fundamentos y guías fuertes, además como ley hay que aplicarla pero también respetarla”.
Perros abandonados,
tema polémico
Belvisi refirió también “a lo que se cita en el capítulo tercero, sobre los animales abandonados, de que ‘aquellos que los abandonan deliberadamente siguen teniendo responsabilidad’ respecto del daño que les puedan ocasionar a otras personas”.
“La ley crea el Registro de Prestadores de Servicio, algo que considero interesante, porque en la órbita de la Comisión de Bienestar Animal estará ese asunto. En esos prestadores de servicio se incluyen refugios para animales, servicios de paseadores y adiestradores, tiendas de mascota, etcétera. Con lo cual es igual a decir que estamos ante el tema más polémico que enfrentamos en Paysandú al considerar la ordenanza departamental que no fue aprobada. En su capítulo sexto la ley establece claramente que ‘habrá quienes prestan ese servicio’, pero no se lo encomienda concretamente a organización oficial alguna. Es dable presuponer que los dueños de los animales pagarían en ese caso el servicio que se les presta (en todos los órdenes) y esto le quita al legislador tomar una decisión sobre el tema de los refugios. Pero también cabe preguntarse, ¿y si no hay prestadores de servicios?”.
Habrá comisión
nacional honoraria
En lo concerniente a la estructura que crea la Ley 18.471, la edila recuerda que “en el capítulo cuarto se crea aquella Comisión Nacional Honoraria de Bienestar Animal, como organismo desconcentrado dependiente del Ministerio de Educación y Cultura. Esta se integrará con un delegado de cada uno de los siguientes ministerios: Educación y Cultura, Salud Pública, Ganadería Agricultura y Pesca, del Interior, Vivienda Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, así como de la Comisión Nacional Honoraria de Zoonosis, Congreso de Intendentes, Universidad de la República, de la Sociedad de Medicina Veterinaria del Uruguay y de las organizaciones no gubernamentales honorarias protectoras de animales con personería jurídica. Desde luego que se arriesga incrementar la burocracia respecto del tratamiento de este tema tan sensible y que será de difícil instrumentación”.
“Queda establecido, obviamente, cuáles son las competencias de esta comisión nacional, pero no se dispone nada respecto de las intendencias departamentales como responsables de la necesaria participación que deberán tener siempre. De acuerdo con lo que pienso, esta comisión nacional será la que tenga que redactar la reglamentación de la ley y -que yo sepa- aún no está instalada (la ley se aprobó a fines de marzo pasado). Para mí este tema no puede ser instalado en una comisión nacional, porque la aplicación de las disposiciones legales serían sumamente lentas, ineficaces y con más de un inconveniente. En general, las intendencias son las que tienen competencia en lo que hace a la vida de sus comunidades y esto no se puede eludir porque es de carácter constitucional”.

NO SE CUMPLE
La edila Nilda Belvisi entiende que las cosas no serán fáciles, solamente con la ley, al menos en Paysandú “en que según el director de Higiene de la Intendencia Departamental, con el cual hablamos días pasados, hay 15.000 perros. Una cantidad importante para que se pueda eludir la competencia del Gobierno Departamental en este tema que hace a la vida de la comunidad”.
También es contundente al señalar que “¡eso sí!, como siempre ocurre, las leyes no se cumplen ni se aplican las ordenanzas. Aquí en Paysandú tenemos ejemplos claros sobre lo que hemos hablado mucho, como es el caso de los ruidos molestos y más flagrante aún la ‘ley de tránsito’ que está vigente en su totalidad pero no se la respeta”.