Nacionales | 20 Jun El presidente Tabaré Vázquez encabezó el acto por los 245 años del natalicio de José Artigas y el Día del Nunca Más que busca cerrar las heridas de la dictadura, con nula participación de la oposición, en medio de la campaña electoral y de una polémica por el destino de los restos del prócer.
En un día soleado y frío, el acto se desarrolló en la Plaza Independencia de Montevideo, donde Vázquez y el ministro de Defensa, José Bayardi, colocaron una ofrenda floral en el monumento a Artigas. Los ministros, unos pocos legisladores oficialistas y uno nacionalista, funcionarios de gobierno e invitados diplomáticos, asistieron al acto, en el que hubo un colorido desfile de bandas estudiantiles de todo el país, que fue seguido por el clásico desfile militar, con apreciable presencia de público.
A excepción de José Mujica, los precandidatos presidenciales a las elecciones internas no asistieron al acto, por motivos de campaña, de salud o por discrepancia con la conmemoración. Vázquez decretó a fines de 2006 la instauración del Día del Nunca Más el 19 de junio, día del nacimiento de Artigas, como fecha simbólica para, según dijo en aquel momento, “avanzar en la reconciliación, en el reencuentro de todos los uruguayos”.
A las dos ediciones anteriores de la conmemoración había asistido el precandidato colorado Pedro Bordaberry, quien en esta ocasión “faltó a la cita por su agenda de campaña”, según allegados. En tanto que el precandidato nacionalista Jorge Larrañaga, quien también había asistido en las dos ediciones anteriores, no asistió en esta oportunidad y criticó la decisión de trasladar los restos de Artigas. Dijo “que dejen tranquilo al prócer de la patria” y que “Vázquez quiere quedar en la historia cambiando la sede de la Presidencia y moviendo los restos de Artigas”.
La ceremonia culminó sin ninguna declaración del presidente, quien posteriormente emitió un mensaje por cadena nacional. Vázquez recordó la personalidad y las acciones de Artigas. Llamó a “rescatar” a Artigas y hacer realidad su ideal, siguiendo su ejemplo. “Artigas no es pasado, Artigas es presente”, dijo.
Vázquez informó sobre dos iniciativas del Poder Ejecutivo: un proyecto de ley, que será sometido al Parlamento, que declara el 2011 como año del bicentenario del proceso de emancipación y autodeterminación, creando una comisión para planificar y organizar la conmemoración en todo el país. También anunció el traslado de los restos de Artigas del “frío” mausoleo de la Plaza Independencia al edificio del mismo nombre, calificando esto como un acto de “justicia y democracia”.
“Artigas nos convoca e impulsa”, dijo. “Y nosotros, los uruguayos, no podemos defraudar a este hombre de carne y hueso que no contó con el favor de los dioses y que en un rincón del mundo libró una batalla desigual contra muchos de afuera y no pocos de adentro; no podemos defraudar a este caudillo que tras ser derrotado en los campos de batalla padeció en obstinado silencio un exilio, podría decirse una crucifixión de 30 años; que no podemos defraudar a este conductor cuyo único refugio fue, es y será su pueblo”, agregó.
“El pueblo hoy, 19 de junio, en ejercicio de su soberanía y ante la autoridad de Artigas, renueva su voluntad y compromiso para que nunca más haya desconfianza y enfrentamientos entre uruguayos, para que el drama y el horror del pasado reciente nunca más vuelva a suceder. Nunca más”, sostuvo. Durante el acto hubo expresiones encontradas sobre la decisión gubernamental. “¡Artigas no se va, Tabaré!”, gritó algún asistente al acto, mientras otro contestaba: “¡Arriba Tabaré, carajo!” El gobierno entiende que el Mausoleo de Artigas es un símbolo de la dictadura, que lo inauguró en 1977, y Vázquez pretende llevar los restos del prócer al Edificio Independencia, antigua Casa de Gobierno frente a la plaza, y convertirla en museo.
Por su parte, el ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, informó que se hará un llamado a ideas sobre el futuro del mausoleo y de la Plaza Independencia. Fuentes militares, molestas con el proyecto de trasladar los restos de Artigas, dijeron a la agencia AFP que la idea del gobierno es “construir un estacionamiento debajo de la plaza”, tras la culminación de la Torre Ejecutiva -frente al mausoleo- donde se mudará la sede de la Presidencia en los próximos meses.