Alcides Salles

Deportes | 23 Jun No se puede levantar. Hasta el momento Wanderers no ha podido sumar siquiera un punto en lo que va del Torneo Apertura del fútbol de Primera División, en el que está complicado o al menos incómodo en lo que tiene que ver al descenso.
Este equipo bohemio, que cuenta con buenas figuras, está lejos en cuanto a resultados de aquel que el pasado año no solo salvó la categoría sino que se hizo de un campeonato.
Alcides Salles, actual técnico de los boteros, afirma que de la situación solo se sale trabajando, que una victoria podría ayudar para cambiar la pisada y que durante las reuniones con los dirigentes se le ha manifestado todo su apoyo.
Es que si bien es cierto aquello de que el entrenador siempre es el fusible que salta primero cuando no se dan los resultados, no lo es menos el hecho de que sin poder trabajar en cancha durante la semana se hace más que complicado poder lograr resultados necesarios. Es, salvando las diferencias, como pedirle un primer lugar a un nadador que se tirará al agua en una piscina olímpica y que entrena en una “Pelopincho”.
“Perdimos un partido insólito con Estudiantil, porque merecimos hacerle más goles. Y en dos jugadas aisladas --un gol de 40 metros y otro de tiro libre— nos ganan el partido”, se lamenta un técnico que dice desconocer de dónde salieron los rumores de su alejamiento. El “Pulga” afirmó que “estuvimos reunidos con los dirigentes y está todo bien. Incluso en la semana se habían sucedido las reuniones con jugadores, cuerpo técnico y comisión. No sé de dónde salen esas versiones porque hablamos incluso anoche (domingo), después del partido y nos dieron el respaldo”.
El gran motivo de la charla con el entrenador fue conocer la realidad de este equipo que junto a Huracán son los únicos que no han sumado. Y la explicación está a la vista, para el que la quiera ver, si se tiene en cuenta que el plantel debe entrenar en los canteros de la costanera, en la Plaza de Deportes o visitar a algún club para jugar un amistoso, porque el “Cairo Cosio” no tiene luz (hay una gruesa deuda). “Y... ¿qué querés que te diga? Falta meterse en cancha, tener prácticas de fútbol para poder corregir los errores. Trabajamos en los canteros, los martes tenemos una hora la Plaza de Deportes pero a esa altura se debería estar haciendo la recuperación del fin de semana… y entramos a la cancha cuando sale alguna práctica de fútbol con algún equipo, pero no podemos estar parando un amistoso a cada rato para hacer indicaciones”, lamenta Salles sin tirarle la responsabilidad a los dirigentes, quienes “colaboran en todo y nos brindan todos los materiales necesarios para trabajar”.
Pero claro, sin cancha para trabajar diariamente, está a la vista que se hace complicado. “Físicamente lo pasamos por arriba… pero hay cosas que tenés que corregirlas adentro de la cancha. Pero de esto se sale con trabajo y entre todos. Y cuando nos digan que nos tenemos que ir, nos iremos”, aseguró.