Niños de varios barrios sanduceros

Locales | 26 Jun Una sala de estimulación para niños entre 4 y 12 años, con juegos acordes a cada edad, fue inaugurada en el Hogar Zorrilla del INAU - Zorrilla y Ayacucho-, donde se conjugan el juego y el aprendizaje, según explicó a EL TELEGRAFO su directora Ana Lanterna.
Dijo que se trata de juguetes en general, como muñecas y pelotas, pero también juegos de encastre, de construcción y cocinas de juguete, títeres, aunque también hay elementos utilizados para mejorar la motricidad, como por ejemplo cajas forradas de tela con botones y cierres para ejercitar los dedos.
“No es solo lo que está a la vista, este mueble está lleno de materiales”, dijo mostrando un armario con todo tipo de libros, juguetes y juegos, “y no podíamos sacar todo para mostrar”.
Concurren 48 niños
Al hogar concurren 48 niños en dos turnos, atendidos por 14 funcionarias, que se integran con dos maestras -una de inicial y otra común- diez educadoras, la cocinera y la directora. Trabajan en un local con tres amplias salas de clase a la que se suma la de juegos. Esta dependencia del Instituto del Niño y el Adolescente de Uruguay tiene dos amplios patios, uno al costado y otro trasero, y las comodidades necesarias para el número de niños que atiende.
El acceso a la sala de juegos “será de a cuatro o cinco niños, siempre acompañados por una educadora para que esté con ellos durante la hora que dispondrán con los juegos”, dijo Lanterna. Utilizarán la sala los niños de “educación inicial, y de primero a sexto en dos grupos, que se irán turnando durante la semana con distintas actividades programadas para cada grupo”.
La sala tendrá sus propias reglas de trabajo, como es “descalzarse y entrar con medias, respetar el trabajo de los compañeros, por ejemplo si hacen una construcción, comprometerse a no romper, jugar sin descuidar la persona del compañero y cuidar su propio cuerpo”.
APRENDER JUGANDO
Explicó que “habrá juegos libres y otros dirigidos, por ejemplo empezar a jugar a la pelota en forma dirigida y luego pasar a juego libre”, porque se entiende que “la forma de aprender de los niños es tocando y manipulando objetos, y ahí aprende matemáticas por ejemplo, cuántos cubos apila, nociones geométricas como los prismas, si algo está cerca o lejos, juegos para atar y desatar, prender botones, cosas que parecen elementales pero que hay niños que no siempre tienen acceso a juguetes o estos materiales, y también es una forma que ellos incorporen el conocimiento”.
La mayoría de los niños que concurren son del barrio Bella Vista, de Don Bosco (antes conocido como “La cubetera”), otros que vienen de más lejos, como la costanera Park Way, “de varias partes de Paysandú”, dijo Ana Lanterna detallando que son unos 25 varones y casi otro tanto de niñas.
Entre ellos, “hay distintos tipos de problemas, pero hay que conversarlos, hacerles comprender las cosas”. Si bien aclaró que “no de todos”, se mostró satisfecha por la respuesta y el apoyo de varios padres.