Locales | 04 Jul El control del escrutinio primario que se realiza en el local de la Junta Electoral de Paysandú está marchando bien, aunque “al principio comenzamos un poco lento por la falta de experiencia de la gente, pero en cuanto agarramos entrenamiento hicimos las cosas más rápidas”, dijo a EL TELEGRAFO Susana Solsona, funcionaria de la Oficina Electoral de Paysandú.
Trabajan en la tediosa pero importante tarea que se cumple en el subsuelo del local los 5 integrantes de la Junta Electoral junto a 12 funcionarios de la Oficina, mientras que otros 3 son especialistas en ver las hojas de identificación y las huellas digitales para validar los votos observados por identidad, que ocurrieron en los circuitos rurales. El horario es de 8 a 20 y los funcionarios detienen su tarea una hora, a las 13, para almorzar.
Explicó además que ahora se está trabajando en dos mesas simultáneamente. “Desde hoy de mañana (por ayer) estamos trabajando así, nos autorizó la Corte Electoral porque de otra manera pueden no dar los plazos para terminar”.
MIéRCOLES COMO TOPe
El trabajo de recuento de votos debe terminar “el miércoles como último plazo”, pero la funcionaria se mostró optimista de que puedan terminar el lunes, considerando que hoy sábado también trabajan.
Las tareas desarrolladas ayer estaban vinculadas a la apertura de “los circuitos rurales y estamos clasificando primero y calificando después los votos observados”. Solsona dijo que ahora “se ponen en una sola urna, luego se califican para darle las máximas garantías cuando se validan y pasan a ser votos comunes”. Esa validación la hacen funcionarios que analizan por qué se votó observado, que no haya votos repetidos y que en los circuitos urbanos solo voten observado los integrantes de la mesa receptora de votos, y en el caso de las mesas rurales, que solamente sea con credencial rural o integrantes de mesa.
ACTAS MAL REDACTADAS
Si bien no pudo cuantificarlas porque “estamos trabajando y no las contabilizamos”, reconoció que “encontramos muchas actas que no estaban del todo bien hechas, por lo que habrá que hacer una revisión general”.
También opinó que deberá “manejarse de otra manera” la formación de los integrantes de mesa, “encarando las charlas de preparación y que los ciudadanos que integren las mesas tomen la labor más concientemente”. Las comisiones receptoras de votos estuvieron conformadas por funcionarios públicos en su mayoría, y como secretarios de mesa hubo unos 80 escribanos en un total de 256 circuitos.