Opinion | 30 Jun Las Cámaras de Emergencias Móviles alcanzaron un acuerdo con el Ministerio de Salud Pública y la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev), para la continuidad del servicio de emergencia que brindan en apoyo al sistema policial 911. El documento firmado señala que en un plazo de 30 días quedará definido un contrato que garantice La contraprestación por los servicios de emergencia en accidentes de tránsito, que las ambulancias privadas brindan, hasta el momento, en forma gratuita.
También especifica que los servicios de emergencia atenderán exclusivamente a los heridos graves de accidentes de tránsito y “alguna otra situación con riesgo de vida en vía pública”, quedando excluidos los accidentes leves, que serán responsabilidad de Salud Pública.
Según informó El País, tras estas novedades el Sindicato de Policía Caminera expresó su malestar, porque ni el Ministerio de Salud Pública (MSP) ni la Unasev contemplaron a las rutas nacionales en el acuerdo alcanzado con las Cámaras de Emergencias Móviles por el servicio 911.
El dirigente gremial Elbio Lemos dijo que sobran los ejemplos para acompañar las denuncias que el sindicato --que entregó un proyecto al MSP-- viene realizando desde principios del año y llamó la atención respecto a que si pocas ambulancias o ninguna concurre a un accidente carretero implica que el traslado deberá realizarlo el patrullero de Caminera, no siempre con el equipamiento, la capacitación o en las circunstancias más adecuadas para la salud de los heridos. El gremialista, que tuvo que realizar una fijación de cuello durante 30 minutos para ayudar a retirar a uno de los heridos que había quedado atrapado dentro del auto, dijo: “Y suerte que yo tengo una preparación médica para estos casos, pero la mayoría de los compañeros no”, puntualizó.
Dijo también que un fallecimiento en un traslado es el riesgo con el que deben trabajar los policías de Caminera, sumado al stress que les genera esta tarea, que no les corresponde y para la cual la mayoría de los agentes no tiene preparación específica.
Se trata, pues, de un reclamo justo, no solo en lo que compete al rol que está realizando Policía Caminera, sino teniendo en cuenta el bienestar de los uruguayos y turistas que transitan por nuestras carreteras, en las que abonan los peajes correspondientes.
En varios países del mundo la cobertura de emergencias en las rutas se financian con parte del producto de los peajes, pero en Uruguay la única carretera que tiene cobertura médica pagada por el peaje es la Interbalnearia. El resto de las existentes en el país parecería haber quedado fuera de cualquier planificación, lo cual es inadmisible.