Gerente de Cámara Nacional de Comercio

Locales | 08 Jul El gerente de Gremios de la Dirección Nacional de Comercio, Santiago Maccio, destacó a EL TELEGRAFO que lejos de significar un avance en el aspecto de la relación laboral y el tejido socioeconómico del país, la Ley de Negociación Colectiva que promueve el gobierno significará una rémora e implicará perjuicios no solo para el empresariado, sino para el propio trabajador, sobre todo en el caso del Interior.
Explicó que “el proyecto de ley se encuentra actualmente en el Parlamento, y hay una serie de aspectos que realmente nos preocupan”.
Nosotros insistimos por ejemplo en que más del noventa por ciento de las empresas en el Uruguay son pequeños emprendimientos, con menos de diez empleados, y sabemos que hay una muy buena relación entre empleadores y empleados, sobre todo en el Interior”.
Apuntó Maccio que “en el Interior incluso hay un contacto hasta familiar muchas veces, y en este proyecto se obliga a que las condiciones de la negociación colectiva, en el caso de que no exista sindicato en la empresa, se lleve a cabo por parte del sindicato de rama”.
Precisó que “creemos que tanto empresarios como trabajadores están aptos para estar negociando en forma bipartita , y que no es necesario un tercero, ya sea el Estado como el propio sindicato, si el empleado no está sindicalizado”.
Por otro lado “otro de los aspectos es precisamente el hecho de que los Consejos de Salarios canalicen únicamente, como está previsto en la actual ley, establecer mínimos de categoría, los laudos correspondientes, y no que se incluyan otros aspectos”, apuntó.
Aclaró el dirigente empresarial que “está por un lado el carril de los Consejos de Salarios y por otro lo que puede ser la negociación colectiva”, en tanto otro elemento adverso a su juicio es que “no se haya incluido en el proyecto la necesidad de una cláusula de paz, en la cual se indique que si es violado por alguna de las partes caería el convenio acordado”.
“Este es un aspecto que consideramos importante para mantener la buena relación y el mejor ambiente laboral posible”, evaluó Maccio, al señalar que en la mayoría de las pequeñas empresas “existe una muy buena relación entre empresarios y trabajadores y creemos que esta regulación tal cual está traerá aún más inconvenientes en el relacionamiento”.