Tras vacaciones y prevención por gripe

Locales | 14 Jul Ayer retomaron sus actividades los ocho centros CAIF de Paysandú, así como los seis Faroles Comunitarios, entidades de apoyo social, de acuerdo a lo indicado por la directora interina de Promoción Social de la Intendencia Departamental, Adriana Imperial.
Precisó que este lunes “reiniciamos los servicios de los CAIF y Faroles Comunitarios, que habíamos interrumpido en parte por las vacaciones de julio y paralelamente siguiendo indicaciones en cuanto a la prevención por la epidemia de gripe”, en tanto recordó que los niños que atienden están comprendidos entre las edades de 0 a tres años.
Apuntó que en el departamento son atendidos por esta vía unos mil doscientos niños en las zonas de Barrio Norte, Nuevo Paysandú, Purificación III, Don Bosco, Barrio Artigas, Centro, San Félix, Porvenir y un centro municipal en Orgoroso.
Respecto a las causas para este reinicio, acotó que “creemos que es importante contar con el servicio”, por cuanto lo necesitan tanto los niños como sus respectivas familias. Consideró además que es contraproducente cortar los procesos que se están desarrollando sobre todo en el caso de niños pequeños, que por esta vía van adaptándose a participar fuera de sus hogares en una serie de actividades en el centro educativo.
Igualmente, aunque se vuelve a desarrollar todo el movimiento regular inherente a los centros CAIF, llamó a la responsabilidad de los padres para que no envíen a los niños que presenten un estado gripal o síntomas que hagan sospechar de una enfermedad en ciernes, tanto por la salud del niño como por la de sus compañeros.
En estos casos subrayó que debe aguardarse más o menos una semana hasta que el proceso de la enfermedad haya culminado, por cuanto en los centros CAIF las actividades determinan que se compartan juguetes y utensilios de uso diario, que son una vía natural de contagio de la gripe, así como otras formas de transmisión por encontrarse en un lugar cerrado.
En lo que tiene que ver con los Faroles Comunitarios, en los que participan unos trescientos niños y adultos mayores, también se ha considerado pertinente reiniciar actividades, de forma de dar continuidad a procesos que luego costaría recomponer y contar con la asistencia adecuada de los beneficiarios, teniendo en cuenta que además de ser centros de aprendizaje y de alimentación, también lo son de formación ciudadana.
Destacó asimismo Imperial que desde marzo de 2008 el INDA se ha hecho cargo en su totalidad de los costos de alimentación en estas dependencias, y desde noviembre del mismo año en lo que refiere a los comedores.