Locales | 13 Jul En base a un relevamiento gráfico e informes que realizó el Instituto Teresiano Centro Cultural Neike, cuyo material llegó a la Casa Uruguay en Estocolmo, Suecia, se presentó la oportunidad de contar con el respaldo de los uruguayos residentes en aquel país brindando equipamiento para personas con discapacidades motrices. Así lo confirmó a EL TELEGRAFO Rosa Barreto, coordinadora de acciones sociales del Neike, quien detalló que “hicimos una reunión con dos personas que fueron a Suecia, la doctora Ana María Fossatti y Mariana Benzo del instituto de rehabilitación Irissc, quienes llevaron un video que hicimos sobre los trabajos que hacemos en Paysandú, en La Chapita, Nueva York y otros barrios. Ahí se mostraba no solamente el trabajo de la institución, sino los trabajos que hay en convenio con el Mides, el de Promoción Social de la Intendencia y otros actores”.
Que llegue a los afectados
Según comentó, lo que llamó la atención al verse el video fue “niños con discapacidad de distinto tipo, tanto motriz como con algún retardo, y vieron la posibilidad desde Estocolmo de enviar elementos técnicos como sillas de ruedas y bastones”. En base a estos datos, se realizaron reuniones con la Comisión Honoraria Departamental del Discapacitado y otras instituciones vinculadas al tema, con las cuales se va a coordinar el manejo del material que se recibiría.
Además, la inquietud es que “efectivamente el equipamiento llegue a los niños y adultos que presentan esos problemas en los barrios más carenciados”. Para esto, “se necesita ir puerta a puerta y saber dónde están esos niños y adultos con problemas, que ya detectamos varios”. El otro aspecto es considerar cómo puede llegar el contenedor a Paysandú, para lo cual se necesitarán recursos económicos y hacer los trámites pertinentes, para lo que se cuenta con “el apoyo del Ministerio de Salud Pública, del Mides” y se buscará también el de empresas.
Dedicación comunitaria
El presidente de la citada comisión, Carlos Damico, comentó a EL TELEGRAFO que se analizó no solamente la rehabilitación médica y técnica, sino lo que definió como “una nueva modalidad, la dedicación comunitaria”, y se trató la transferencia “de todos los elementos que la Casa Uruguay tiene para discapacitados y que eso pueda llegar a Paysandú”. Si bien hay varias organizaciones de discapacitados en Paysandú, la cooperación generalmente se hace a una institución referente, por lo que “se trabaja a través de la Comisión de discapacidad y el Mides para toda la parte formal, la firma de los convenios de entrega o de uso de los equipos”, dijo.