Deportes | 16 Jul Fútbol es fútbol. Cuando Defensor tenía todo a su favor para quedarse con el título, Nacional se aferró con uñas y dientes a la posibilidad de revertir todos los pronósticos. Y no era fácil si se tiene en cuenta que para los tricolores abrazar el Campeonato Uruguayo significaba jugar al menos cuatro partidos, y salir airosos ante el que era considerado el mejor equipo de la temporada.
Pero el mejor terminó siendo Nacional, después de ponerle el pecho a las balas para terminar invicto en esta interminable serie ante Defensor, ganando tres de los cinco partidos que necesitó para dar la vuelta olímpica y dejando en claro que este equipo tricolor no baja los brazos ante la adversidad. Anoche selló el título con otra victoria, otra vez por 2 a 1, para desatar la locura de los hinchas que vieron cómo el equipo volvía a ser superior a un Defensor que sufrió demasiado las ausencias y que repitió las pobres actuaciones de las últimas presentaciones.
Victorino abrió el marcador con un cabezazo, ganando en el primer palo. Así Nacional trasladaba la superioridad en la cancha a los números, ante un rival que no encontraba el camino más allá de que Muñoz tuvo una buena atajada ante Vera, que se iría sentido antes de finalizar la primera etapa.
Ya en el complemento Navarro igualó el tanteador, pero Defensor necesitaba más ya que la igualdad le daba el título a Nacional. Y el tricolor, después de algunos minutos de paridad, volvió a apretar el acelerador. Lo tuvo en dos o tres ocasiones, hasta que Lodeiro dijo basta. El sanducero, la gran figura de este equipo tricolor, recibió de García, ingresó al área y remató abajo, a la izquierda, para desatar la locura generalizada, para cerrar definitivamente la serie final más larga de la historia del fútbol uruguayo.
Y Nacional, que llegaba como punto a esta definición, terminó siendo banca. Porque no se dio por vencido, porque tiró por el piso la ventaja deportiva con la que llegaba Defensor.
Y porque, en definitiva, terminó por demostrar en las que duelen que fue el mejor equipo del medio, logrando las finales en forma invicta ante el equipo más parejo del año, hasta acá.

NACIONAL 2 DEFENSOR 1
Escenario: Estadio Centenario. Público: 40.000 personas. Arbitros: Jorge Larrionda, Mauricio Espinosa e Igor Moreira.
Nacional: Muñoz; Rodríguez, Victorino, Coates, Romero; Fernández, Oscar Morales, Arismendi; Lodeiro (87’ Brum); García (90’ Blanco) y Biscayzacú (70’ Angel Morales). DT: Gerardo Pelusso.
Defensor: Fernando Rodríguez; Pintos, Curbelo, Risso, Herrera (68’ Ariosa); Marchant, Amado, Díaz; De Souza; Nasa (72’ Mora) y Vera (38’ Navarro). DT: Jorge Da Silva.
Goles: 25’ Victorino, 59’ Navarro, 85’ Lodeiro.