Deportes | 10 Ago Le erró y lo pagó caro. Habrá apostado ella, habrá colaborado el rincón, lo cierto es que el haberle puesto las fichas a salir al cruce terminó rápidamente con el sueño de Chris Namús de quedarse con una porción del cinto Superligero del Consejo Mundial de Boxeo.
Uruguay vibró, llenó el Palacio Peñarol para ver si podía ver a una pugilista celeste probarse el cinto interino del CMB, pero resultó ser que el sueño de Namús se esfumó en escasos segundos, todo lo que duró una pelea en la que nunca pudo contener a la colombiana Leli Luz Florez.
Pese a la diferencia física en cuanto a estatura y longitud de brazos, Namús optó por ir al choque. A eso la llevó inteligentemente Florez, que sacó a relucir rápidamente toda su potencia y comenzó a conectar golpes claros, directos, que comenzaron a sentirse en el físico de la uruguaya.
Lo cierto es que la sonrisa inmensa con la que Namús entró al ring comenzó a esfumarse apenas transcurridos unos segundos.
Es que estaba claro que la morena colombiana no era una boxeadora de esas que sirven para agrandar el récord del rival: esta iba en busca en serio de un título de los que interesan, de los del CMB, más allá de esta locura de dividir los títulos en pedacitos en pos del negocio. Florez mostró toda su potencia como para definir rápidamente el combate que la tenía frente a una púgil sin respuestas, que perdía una y otra vez en la corta.
A falta de 27 segundos para terminar el primer asalto, Florez conectó un zurdazo al mentón que fue el comienzo del fin para la uruguaya. Namús retrocedió rápidamente dando tres pequeños saltos con su pierna derecha, tocó las cuerdas y más allá de alcanzó a darse vuelta para salir de la zona, fue todo ante una lluvia de combinaciones que terminaron por dejar grogui a la boxeadora local, que cayó aparatosamente. Intentó levantarse y volvió al suelo; se incorporó sin saber dónde estaba, y logró ser contenida por el árbitro, que paró la pelea.
La mediática Chris Namús, que había sido noticia en los últimos meses por la escandalosa ruptura contractual con sus representantes, el jucio que le entabló su ex entrenador Antonio Canedo por incumplimiento de contrato y la unión a sus nuevos empresarios, terminó en la lona, vencida por KOT.
Namús, que venía entrenando con el equipo de la argentina Marcela “La Tigresa” Acuña, fue totalmente superada en su intento de lograr la faja interina del CMB, sin poder confirmar arriba del ring todo lo prometido debajo de él.
Antes, la argentina Yesica Boop retuvo sin problemas el título Minimosca de la Asociación Mundial de Boxeo al derrotar por puntos a la mexicana Ibeth Zamora, llevando su invicto a 10 combates.