Locales | 08 Ago Para el senador nacionalista Ruperto Long los sucesos que se están registrando en Venezuela no solo son violatorios de la libertad de prensa, sino que indican que se está encaminando al país caribeño hacia un régimen totalitario.
El parlamentario nacionalista precisó a EL TELEGRAFO que “en estos días se acaban de clausurar 34 radios y según se anuncia está previsto el cierre de alrededor de otras 200 emisoras y 45 canales de televisión. Evidentemente, una acción de esta magnitud, sin duda alguna, pone en peligro la libertad de expresión del pueblo venezolano”.
Puntualizó que esta medida tiene como argumento que estas radios y canales pudieran no estar cumpliendo con algunos requisitos legales, pero “todos ellos corresponden a medios de comunicación que en sus espacios editoriales desarrollan opiniones críticas hacia el gobierno actual de Venezuela”.
El senador de Alianza Nacional observó que “las expresiones que se vierten por parte del gobierno para justificar esta acción nos preocupan, porque entendemos que corresponden a una forma de pensar que no es la de un Estado democrático”.
Además, “aclaró que esto forma parte de la política de que el pueblo sea el propietario de los medios de producción estratégicos, en la cual enmarca otra serie de medidas de su gobierno”, señaló Long, y acotó que “estamos convencidos de que cualquier agresión a los derechos de expresión, a la libertad, cualquier violación de los derechos humanos en cualquier país nos afecta a todos y, por lo tanto, también a nosotros”.
Observó asimismo que no se trata de un hecho aislado, sino que además se han registrado “ataques a diversos medios de comunicación que notoriamente incluyen al Canal Globovisión. Estamos hablando de ataques que incluso han sido filmados y que todos hemos visto a través de los medios de comunicación”. Sostuvo que con estas acciones, junto a determinada legislación en proceso, “se está avanzando, paso a paso, hacia la instalación de un Estado totalitario; quien no lo quiera ver, que no lo vea, pero esa es la realidad”.
“No estamos hablando de una medida aislada –que puede ser discutida–, sino de un conjunto de medidas que permanentemente se adoptan violando derechos humanos fundamentales. En particular, al estar Venezuela vinculada al Mercosur, estos hechos también se reflejan en la violación a las cláusulas democráticas de este tratado”.