Locales | 09 Ago Vecinos de calle Montevideo
Que la Intendencia rinda cuentas de los adoquines y el dinero:
Haciendo un poco de historia, el empedrado de calle Montevideo, en el tramo de avenida Salto hasta calle Washington, cuenta con unos 26 años de construido por un intendente profesional e idóneo en el tema, que no se equivocó en el intento de modernización de la ciudad, ya que esta calle se convirtió sorpresivamente en una arteria importante al centro de la ciudad, al inaugurarse pocos años atrás el puente Paysandú-Colón.
La inversión de la construcción se dividió entre los padrones que lindaban con la calle Montevideo, en otras palabras la Contribución Inmobiliaria subió sustancialmente; pero como era para mejorar esta pequeña parte de la ciudad pagamos la contribución sin problemas.
Estos adoquines han soportado a través de todos estos años el intenso tráfico vehicular, en especial de los camiones con zorra y remolques con cargas máximas, sin verse un deterioro pronunciado que salte a la vista. No presenta rajaduras como el hormigón por las dilataciones, o sea tiene total vigencia este tipo de ingeniería vial.
Pero el mantenimiento de los adoquines a través de los años y los distintos Gobiernos municipales ha sido un desastre: sobre todo por el levantamiento de los mismos por roturas de los caños o conexiones, tapándose con bitumen. O en su defecto con hormigón … en fin, una desprolijidad total.
Al principio como era nuevo se reparaban con los mismos adoquines, después se fue desvirtuando. Una de las últimas reparaciones que vi hacer por parte del organismo competente o una empresa privada: se sacó por supuesto, los adoquines. Arreglaron los caños que perdían agua, se tapó con tosca y se llevaron los adoquines para evitar que se pierdan o que se produzca algún accidente por su desparramo ¿? Pero estos adoquines no vuelven al lugar de origen, o sea para reparar nuevamente la rotura de la calle. La IDP ha sido incapaz de resolver esto, ni ha capacitado personal para reparar esta calle, o en el último caso contratar una empresa privada.
Creo que todos los contribuyentes de esta zona contribuimos a mejorar esta arteria, pero la Intendencia ha sido desprolija y no respeta a los contribuyentes. Porque si no pagamos en fecha o nos olvidamos los vencimientos, nos cobran multas y recargos y no somos buenos pagadores, sacándonos la bonificación correspondiente de aquí a un par de años sucesivos: gran castigo.
Que la IDP rinda cuentas de los adoquines y de nuestro dinero, pues está comprobado que es muy bajo el mantenimiento de ponerlos de nuevo, salvo alguno que se rompa, que casi no hace escombros su reparación. Lo menos que puede hacer es reparar a la brevedad como estaba en su origen, para subsanar esta omisión que es el pensamiento compartido de todos los vecinos de calle Montevideo de avenida Salto a Washington.
El que firma abajo, no tiene inclinación política para ningún lado, solo desea poner las cosas en su lugar, o sea, los adoquines. A.J.C. CI 2.626.852-3