Policiales | 03 Sep El delegado del Sindicato de Policías del Uruguay (Sinpolur) e integrante de Policía Caminera, Elbio Lemos, manifestó a EL TELEGRAFO su preocupación por la falta de cobertura de emergencia en accidentes carreteros, ya que este servicio no fue incluido en el convenio alcanzado entre el Ministerio de Salud Pública y las empresas de emergencia móvil. Entiende que las autoridades deberían hacer un esfuerzo por darle una solución al tema y opinó que fue un “error” haber adjudicado los peajes sin exigir un servicio de asistencia.
Lemos admitió que contrariamente a lo que había trascendido, el fallecimiento de un hombre de 48 años en un accidente ocurrido hace pocos días en Ruta 3 no fue constatado por un médico que acertaba pasar por el lugar, sino por el facultativo de la Policlínica de Quebracho, quien se trasladó expresamente hasta el lugar del siniestro; pero aseguró que la situación es igualmente preocupante.
“Valoramos mucho la actuación del médico que estaba cerca y fue, no debemos desmerecer esa atención, pero estamos muy lejos de alcanzar un posible acuerdo para que todos podamos circular tranquilos en las rutas nacionales”, afirmó.
Dijo que nuestra sociedad no debe permitir que siga pagándose “con vidas humanas” este déficit asistencial, en tanto reclamó soluciones a “quienes están involucrados en esto”, que son precisamente “las autoridades”.
“Nosotros ya lo hemos dicho, hemos presentado proyectos, estadísticas. Nos hemos reunido con la ministra de Salud Pública y hemos mandado cartas al Ministerio de Transporte, que ha hecho oídos sordos en el tema de la concesión de las rutas”, añadió.
Dijo que actualmente los heridos son trasladados en móviles policiales porque “las emergencias médicas no van”, en tanto recordó que Policía Caminera asume la doble tarea que implica controlar el tránsito y hacerse cargo del traslado de heridos.
“Cada uno debe ocuparse de lo suyo. El médico atiende a sus pacientes y la Policía de Tránsito al tránsito”, opinó.
Acuerdo parcial
A través de un acuerdo suscrito recientemente con el Ministerio de Salud Pública, la cámara empresarial que agrupa a las emergencias móviles se comprometió a brindar cobertura en los llamados al 911 relacionados a accidentes de tránsito graves. Este acuerdo no incluye los siniestros ocurridos en carretera ni aquellos que generan lesionados leves, en tanto abarca capitales departamentales y Área Metropolitana. Lemos recordó que durante las negociaciones la gremial planteó el problema de los accidentes carreteros, pero cuestiones de orden “económico” impidieron su inclusión en la referida cobertura.
“A la cámara nacional de emergencias no le sirvió el dinero que le daba el Ministerio de Salud Pública, que eran 4 millones de pesos. Ese dinero será distribuido entre todas las unidades de emergencias médicas del país, pero solo para cubrir capitales departamentales”, afirmó Lemos y agregó que la búsqueda de una alternativa para este déficit “está muy lejos”.
“No podemos seguir dando ejemplo con vidas humanas”, advirtió. Asimismo aseguró que todos quienes circulan en las rutas nacionales y pagan los peajes deberían tener derecho a cobertura de emergencia, tal cual sucede en países como Argentina y Brasil, situación que –agregó- no se previó al momento de efectuar las concesiones a empresas privadas.
Refirió al “error tan grande que comete el Ministerio de Transporte de brindarle la concesión de peaje (a las empresas) sin obligarles a que tengan una asistencia sanitaria en las rutas”, al tiempo que se manifestó convencido de que este servicio no sería costoso.
“En Argentina y Brasil, si usted paga un peaje, puede preguntar qué cobertura tiene. En cada peaje de Brasil usted tiene una ambulancia en el propio puesto o a una distancia cercana, tanto para cubrir siniestros de tránsito como para si usted sufre algún percance de salud, ya sea cardíaca, estomacal”, agregó.
Garantizó que actualmente Policía Caminera, con escasos recursos humanos y materiales, está haciendo los mayores esfuerzos “para que las cosas salgan bien”, pero reclamó la rápida solución de un tema que –según su óptica- no está próximo a solucionarse. “Esto va para lejos”, concluyó.