Miguel Bidegain

Rurales | 10 Sep El Instituto Nacional de la Leche (Inale), “es la creación de un nuevo centro burocrático y a todas luces innecesario”, señaló a EL TELEGRAFO el vicepresidente de la Federación Rural (FR) y productor lechero, Miguel Bidegain. El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) para tomar decisiones en lechería “no necesita un Inale y para saber qué pasa en la lechería uruguaya, tampoco lo necesita”.
El citado instituto está integrado por el gabinete productivo, los ministerios de Industria y Economía, todos los sectores, y “no han tomado absolutamente ninguna participación en nada. En su funcionamiento ha sido un paquidermo y no amerita seguir funcionando”.
Bidegain criticó a las gremiales que la integran, al manifestar que “están perdiendo el tiempo adentro del Inale, porque aparte lo que promueve este instituto tampoco le llega así al ministro Agazzi, ya que tiene filtros intermedios”.
Complicada
La situación del sector lechero “está muy complicada”, señaló este tambero del departamento de San José. El panorama internacional, la baja del precio y la sequía afectó al sector, “pero el desbalance en los costos es muy importante”. Entiende que “hemos entrado en costos altísimos, algunos que dependen de nosotros que somos petróleo-dependientes, y otros que no, como los aumentos en los aportes patronales, en la energía, el manejo del tipo de cambio, tener un gasoil a U$S 1,20, y que el sector tenga actualmente 20 millones de dólares menos por devolución de impuestos”.
“Alguno por allí pensó que viviríamos siempre en una panacea, pero esto siempre fue cíclico. Años atrás cuando Agazzi era subsecretario del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), le decíamos que esto era muy peligroso, porque nos estábamos metiendo en un embudo y ni bien cambiaran las condiciones, como cambiaron lamentablemente después, pasaría lo que sucede ahora y nadie le encuentra una solución”, precisó el dirigente gremial.
A través del Inale “le hemos planteado varias soluciones y no les sirvió ninguna, ni el fideicomiso ni los 16 millones de dólares de la Corporación Nacional para el Desarrollo (CND) como préstamo, y ahora lo llevaron a U$S 6 millones. La discusión actual es a qué categoría de productores se le hecha una mano, y eso no puede pasar”.
“A veces decimos que en un gobierno socialista los que sabemos más de socialismo somos nosotros, porque el ingeniero Agazzi manda a los tamberos grandes a plantar soja, pero nosotros tenemos claro que sin los productores grandes no existimos”.
“El esfuerzo es de todos, pero los pequeños productores en el caso nuestro que mandamos a Conaprole, si no fuera por los productores grandes la cooperativa no existiría”.
Bidegain recordó que se han mantenido reuniones con referentes de los diversos sectores políticos y “no hay en el horizonte una salida. Primero debemos bregar por un tipo de cambio que no nos castigue tanto y nos deje competir y por ahí baje nuestros costos internos. Se aducía endeudamiento, este está prácticamente solucionado, y el productor no quiere entrar a los bancos porque está quemado con leche”. Aclaró que “no es un tema financiero sino de rentabilidad”.
Como productor rural el dirigente de la FR desea que “valga mucho la soja y los árboles, para que los sectores que estamos más castigados, como es el criador ganadero, el lanero y los lecheros, nos dejen un poco tranquilo desde el punto de vista tributario”.
“Hablamos que el tipo de cambio es un problema, pero lleva casi un 7% acumulado en lo que va del año. Uruguay está posicionado segundo dentro de los países de Sudamérica con mayor presión tributaria. Pero si vemos lo que tenemos de deuda externa y el déficit fiscal, será muy difícil que el gobierno sea del color que sea, nos saque de arriba la presión tributaria”, manifestó.
Sostuvo que si al sector lechero se le saca la carga tributaria que tiene, “le pesa en $ 0,30 a $ 0,40 por litros de leche”.