Deportes | 19 Sep No tiene paz. No le encuentra la vuelta al equipo, su selección está complicada para acceder a la clasificación para el Mundial 2010, y para colmo de males hasta los hinchas están perdiendo la idolatría hacia Diego Maradona.
Por eso el técnico de la selección argentina se tomó el avión después de haber perdido por las eliminatorias ante Paraguay, y se fue a Italia para pasar algunos días en un spa de la ciudad de Merano, donde no solo descansaría sino que se sometería a un tratamiento para adelgazar esos kilos de más que volvieron a aparecer en el ex jugador.
Pero de tranquilidad nada. Mientras en Argentina llueven críticas por haberse ido en un momento complicado de la selección, y el presidente de la AFA, Julio Grondona, tuvo que salir a defenderlo asegurando que este viaje estaba planeado, los dolores de cabeza siguieron a Maradona hasta el mismísimo hotel Grand Palace de Merano. Es que integrantes de la Guardia de Finanzas se hicieron presentes en el lugar y le secuestraron al “10” los aritos de diamantes por una gruesa deuda que mantiene con el fisco italiano. Si bien los aritos están valuados en unos 6.000 dólares, no alcanzarán para cubrir lo que debe Maradona al fisco italiano, ya que en 2005 el ahora técnico albiceleste fue condenado a pagar 36 millones de euros por deudas que mantiene desde que era jugador del Nápoli. Lo cierto es que en cada viaje que Maradona hace a Italia, se queda sin algo. Ahora fueron los aritos, pero hace tres años atrás le secuestraron dos relojes Rolex, cotizados en 11.000 euros.
De esos 36 millones de euros que adeuda Maradona, 22,4 millones son por intereses. Y está claro que con los aritos y los Rolex no alcanzó a cubrir la deuda, que sigue creciendo.