Nacionales | 15 Oct El Ministerio del Interior, en el marco del Área de Política Institucional y Planificación Estratégica, presentó la División de Políticas de Género que funcionará en esta secretaría de Estado. La directora, Marisa Lindner, destacó que con esta experiencia se pretende introducir nuevas miradas en la seguridad nacional desde una perspectiva de género, la que abarca la defensa de los derechos de mujeres y hombres por igual.
El Ministerio del Interior, en el marco de la Transformación Democrática del Estado y de los compromisos asumidos en el Plan Nacional de Igualdad de Oportunidades y Derechos para hombres y mujeres, creó la División de Políticas de Género, dependiente del Área de Política Institucional y Planificación Estratégica.
 El gerente del Área de Política Institucional y Planificación Estratégica del Ministerio del Interior, Rafael Paternain, dijo que el ministerio cuenta con condiciones, objetivos, procesos y acumulaciones propias para llegar a esta instancia de creación de la División de Políticas de Género. Recordó que desde el año 2005 esta secretaría asumió obligaciones para el diseño de estos objetivos, y que por tal motivo decidió constituir este espacio que cuenta con recursos propios para implementar las acciones que considere necesarias en el combate a la discriminación y violencia de género.
Agregó que esta nueva división tendrá el objetivo de asesorar, diseñar, monitorear y evaluar las acciones que el ministerio lleva adelante en materia de seguridad pública de género. Aclaró que el tema género no es específico de las mujeres, sino que abarca a toda la sociedad en términos de desigualdades por categorías, las que incluyen también la discriminación masculina.
Por su parte, el ministro del Interior, Jorge Bruni, dijo que Uruguay fue, a lo largo de la historia, un ejemplo de desarrollo normativo en relación al reconocimiento de derechos de la mujer. Además, destacó el avance del Estado en materia de interinstitucionalidad para construir políticas conjuntas que beneficien a la población.
La directora de la División de Políticas de Género, Marisa Lindner, dijo que la mirada de género aporta a la seguridad ciudadana un mejor conocimiento de las causas, los actores y las condiciones materiales y humanas que llevan a las personas a cometer delitos. Además, brinda herramientas metodológicas y procedimientos más adecuados, eficientes y humanos, contribuyendo al cambio de la cultura institucional.
Los lineamientos generales de trabajo abarcan tres ejes: la seguridad ciudadana, la humanización del sistema carcelario y la dignificación de la fuerza policial. Con relación a las políticas de seguridad ciudadana se profundizará en dos ejes: colocar el tema violencia como prioritario de las políticas de seguridad ciudadana, y reconocer las diferencias que existen, a nivel del territorio nacional, en la seguridad de hombres y mujeres. Explicó que se trabaja junto al Programa de Mesas de Convivencia para la Seguridad Ciudadana, ubicado en distintas regiones del país.
Agregó que el tema de violencia doméstica y aspectos específicos de las mujeres no se encuentran en la agenda, por lo que es necesario trabajar para que se tome conciencia de que esta problemática está presente no solo en el espacio público sino en la vida privada de las personas. El porcentaje de tasa de denuncias de violencia doméstica por cantidad de habitantes aumentó en los últimos años al 80%.
A nivel de la incorporación de las mujeres en el ámbito policial, Lindner explicó que a pesar del ingreso de mujeres a la Policía, éstas siguen siendo una fuerza de trabajo minoritaria. Por tal motivo es vital trabajar en la capacitación para el ingreso a la carrera policial, a nivel de subalternos y oficiales. En cuanto a las políticas de género aplicadas al sistema carcelario, dijo que el 8% de los ciudadanos privados de su libertad son mujeres, cifra que se encuentra en aumento constante.
Asimismo, dentro de las políticas de género se incluye el tema de la masculinidad y fundamentalmente relacionado con la población carcelaria. Se aspira a que para el próximo censo nacional de población carcelaria se trabaje en relación a las políticas de género en la violencia doméstica y los derechos sexuales y reproductivos.