Locales | 16 Oct Al difundirse en varios países la producción de arándanos para ingresar en contraestación en Europa, el mercado internacional no tiene la misma agilidad que al principio y debería organizarse la producción para evitar que se depriman los mercados, señaló Jumil Crouzet Deleón.
Consideró que el bajo valor del dólar se manifiesta como un factor “que en realidad creo que es el común denominador para todos los exportadores, y lo vemos también en la naranja, porque estamos muy arriba en los costos en dólares. Es que aparte del efecto mundial tenemos un aumento de los precios internos por encima de la inflación y una moneda revaluándose frente al dólar, lo que constituye un efecto doble, en tanto el mercado empezó a sentir la oferta importante de arándanos, que está en aumento. Ya no es el mismo mercado de antes, está poco ágil y hay que ser muy prudente con el tema de los costos”, puntualizó. Recordó que el año pasado “hubo una catástrofe en esta producción en Argentina” y “aparte fue afectada la zafra en Uruguay por haber caído el precio de venta en Europa por la crisis, además de inflación bestial en los costos”.
“La zafra anterior fue muy complicada, y solamente los que sacaron la producción muy temprano o muy tarde tuvieron buenos promedios, pero en el grueso no hubo buenas utilidades”, evaluó.