Policiales | 24 Oct La Justicia Penal envió nuevamente a la cárcel a un sujeto de 20 años con especial predilección por hurtar en agencias de ómnibus. En esta oportunidad, el delincuente se introdujo en las instalaciones de Agencia Central en la Terminal y robó dinero, pero fue inmediatamente capturado por un efectivo de la Seccional Primera que vigilaba el lugar.
De acuerdo a información extraoficial obtenida por EL TELEGRAFO, próximo a las 5.30 de la madrugada del viernes un policía de la referida seccional, asignado a la Terminal de Ómnibus, notó que una de las ventanas del local de Agencia Central permanecía abierta. Como el área de expendio de pasajes había cerrado hacía media hora, pensó que algo extraño estaba sucediendo, así que subió a la planta alta por las escaleras ubicadas en el ala sur del edificio y luego de atravesar el hall principal se acercó hasta el local. A través de los cristales vio que dentro del recinto un individuo introducía cosas en una mochila y que al notar su presencia vació el contenido de un cajón. Enseguida el intruso trató de fugarse hacia al hall, pero al toparse con una puerta cerrada optó por dirigirse hacia la ventana que da hacia la zona de andenes y arrojarse al vacío.
El policía advirtió la maniobra y regresó rápidamente hacia la calle, donde constató que el fugitivo ya se había reincorporado y se alejaba del lugar. Fue tras él, lo derribó y ambos se trabaron en lucha, hasta que finalmente el móvil de la Seccional Primera acudió en apoyo y fue posible reducir al ladrón, quien al caer desde la ventana experimentó un golpe en la cabeza. El efectivo que lo detuvo también resultó lesionado y en el Hospital Escuela del Litoral le diagnosticaron fractura de falange distal del quinto dedo de la mano izquierda, por lo que recibió un vendaje y licencia por tres semanas.
Conocido ladrón
Una vez en la comisaría, el sujeto fue identificado como Jonathan Alberto Cardozo Gallardo, de 20 años, poseedor de tres antecedentes penales por hurto, uno de ellos perpetrado en perjuicio de varias agencias de ómnibus de la Terminal, donde ocasionalmente se desempeñaba como maletero. Profundo conocedor de la operativa del lugar, sabía que el local de Agencia Central cerraba puntualmente a las 5 de la madrugada y no abría hasta las 7, así que esperó pacientemente su oportunidad.
Los policías inspeccionaron una mochila azul que portaba el detenido y constataron que contenía unos 6.000 pesos en billetes de 100, 50, 20 y monedas. Asimismo, le incautaron más dinero que mantenía aprisionado entre las manos y que aseguraba que le pertenecía. Los investigadores regresaron a la Terminal y en el local de la empresa damnificada encontraron rastros de sangre y cajones cuyos candados habían sido violentados y donde aún permanecía dinero acondicionado en pequeños fajos.
Cardozo, domiciliado en Nuevo Paysandú y recientemente liberado de la Cárcel Departamental, dijo que esa noche escaló el muro de la Terminal y desde los techos alcanzó las ventanas de la agencia.
Las abrió y una vez adentro violentó varios candados y se apoderó de dinero, pero en ese momento fue sorprendido por un policía. Poco después compareció ante el juez Pablo Dalera, quien dispuso su procesamiento con prisión por el delito de hurto especialmente agravado en grado de tentativa.