Locales | 30 Oct El etnomusicólogo sanducero Carlos Blanco Fadol ofreció una charla a los alumnos del Liceo Nº3, en cuyo transcurso compartió detalles de su obra, exhibió su último documental y ejecutó instrumentos autóctonos de los cinco continentes. Ante una sala colmada de estudiantes y docentes que siguieron atentamente su exposición, relató su periplo de más de 35 años alrededor del planeta, reuniendo y creando instrumentos étnicos hasta constituir la colección más grande del mundo y fundar dos de los museos más visitados de Europa.
Antes de comenzar la charla, la directora de la institución, Adriana Tejeda, recordó el vínculo afectivo que la une al musicólogo y agradeció el apoyo de la Dirección Municipal de Cultura para organizar la actividad. El coordinador de Museos, Alfredo Beraldo, destacó el trabajo del disertante y manifestó su beneplácito por la inminente concreción en nuestra ciudad del Museo de la Música, que se nutrirá con cientos de instrumentos étnicos de todas partes del mundo donados por Blanco Fadol, para constituir el “mundo mágico del sonido”.
A través de un trabajo de más de tres décadas, el musicólogo reunió más de 3.000 instrumentos de 150 países, muchos de los cuales permanecen en los museos españoles de Murcia y Alicante, visitados anualmente por miles de personas. Asimismo, es inventor de decenas de instrumentos y recientemente publicó una nueva enciclopedia bilingüe (Instrumentos Musicales Étnicos del Mundo), en tanto filmó documentales que actualmente pueden verse en Internet a través del sitio Youtube, al tiempo que fue nominado en dos ocasiones al premio Príncipe de Asturias.
De visita en Paysandú para ajustar detalles del Museo de la Música y capacitar a los docentes que trabajarán allí, Blanco Fadol exhibió un video que documenta su visita a una tribu amazónica de Perú (los Yagua), a quienes devolvió un instrumento musical que habían dejado de utilizar y les enseñó nuevamente a fabricarlo y ejecutarlo. También repasó su periplo a través del mundo con fotografías obtenidas en México, India, Indonesia, Perú, Senegal y Birmania; en tanto recordó la ocasión en que contrajo dengue y exhortó a los jóvenes a trabajar para que esta enfermedad no se instale en nuestro medio.
Asimismo describió algunos instrumentos que conserva en los museos de España, así como la modalidad de visita interactiva que introdujo en sus amplias salas.
Momento musical
Por último, para deleite de los jóvenes, exhibió y ejecutó instrumentos que trajo consigo en esta ocasión. En primer término utilizó la típica flauta (Punji) utilizada por los encantadores de serpientes en India y Pakistán, capaz de emitir un sonido estridente y únicamente ejecutable a través de la denominada “respiración circular”.
Luego ejecutó un extraño instrumento de Burkina Faso y una pequeña flauta irlandesa fabricada con hueso. También un instrumento utilizado por los jóvenes filipinos para enviar mensajes secretos a su enamorada, otro de bambú originario de Indonesia, uno de Tanzania y una quena americana. Dijo que el 70 por ciento de los instrumentos que conforman su colección “se han dejado de tocar” y culminó la charla ejecutando uno de su invención: un charango-quena. Como suele suceder en todas partes del mundo, una vez concluida la exposición los alumnos permanecieron en sus lugares reclamando más música y anécdotas.