Locales | 02 Nov Los expendios callejeros de comidas “al paso” deberán solicitar el permiso municipal correspondiente para poder establecerse con carros, mediotanques o estructuras móviles de cualquier tipo, según confirmaron el director de Higiene de la Intendencia, doctor Eduardo Américo, y la jefa de planeamiento urbano, arquitecta Andrea Ostuni. Los jerarcas municipales informaron, de acuerdo con un aviso publicado en EL TELEGRAFO, que no se podrá instalar expendios en calles y veredas, sino solamente en otros lugares públicos y privados.
En caso de ser un lugar público -plaza, parque o similar- deberá contar con la autorización expresa de la oficina que analiza cada petición, llamada “sala de análisis” e integrada por técnicos de Urbanismo, Higiene, Tránsito y Asesoría Letrada.
Segundo llamado
“Este es el segundo llamado anual que se hace”, explicó la arquitecta Ostuni, y las personas que tienen algún tipo de carro en un espacio público deberán regularizar entre el 3 y el 30 de noviembre, para que podamos controlar desde el punto de vista territorial, del espacio que ocupa y si es bueno o no, y también por la higiene”.
Recordó que “no todos los espacios públicos se pueden ocupar, las calzadas y las veredas no son lugares donde puedan estar los carros de comida, y no pueden instalarse en cualquier lado sin pedir permiso a la Intendencia”.No obstante explicaron que es distinto el caso de los vendedores ambulantes, como por ejemplo quienes venden frankfurters, que no se estacionan permanentemente en el mismo lugar. Si bien la autorización que se da “es precaria y revocable”, no tienen que hacerla todos los años, sería “solo para los nuevos”.
PREGUNTAR Y ESPERAR
La Intendencia no tiene una lista de lugares habilitados o prohibidos para la instalación de expendios de comida al paso. Es así que cuando alguien desea instalarse, debe presentar la solicitud por escrito y con los “cinco valorados” correspondientes de $ 7 cada uno y esperar la respuesta que puede demorar “entre uno y dos meses a lo sumo”, según dijo Américo, quien agregó que “la gente puede ser más creativa que la lista que pueda hacer la Intendencia”. La “sala de análisis” estudia la propuesta y se expide afirmativa o negativamente. Ostuni dijo que en caso de considerarse inconveniente el lugar, generalmente se propone uno alternativo. “El criterio que usamos es de los espacios más abiertos, tipo plazas o lugares públicos. Lo que buscamos es que le aporte algo a la ciudad, que no sea un espacio para conflictos ni por su funcionamiento, ni por la estética ni lo formal”, dijo Ostuni.
Si bien actualmente hay carros o expendios instalados en lugares que no deberían, “no podemos de un día para el otro hacer un realojo”, explicó el doctor Américo, “lo que se va a hacer gradualmente”, pero evitarán que los nuevos se instalen sin autorización. Ostuni agregó que ya Asesoría Letrada ha hecho algunos desalojos de la vía pública “a través de la Justicia, y eso a veces demora, que es el caso de los que ya estaban instalados. Pero hay otros que han salido”. Mencionó como ejemplo “el que estaba frente a un comercio”, en Baltasar Brum casi 18 de Julio, que “era una molestia para los que estaban ahí y un problema para el tránsito por los que doblan”.
Las cosas al revés
Sin embargo, éste sería el último plazo para presentarse formalmente los expendios que no lo hayan hecho el año pasado. De otra manera, “van a ser retirados, eso se va a aplicar”, y si no se hizo hasta ahora es “porque hace años que están instalados, también hay gente que los respalda, mandaron una carta a la Intendencia y aseguran que se les dio permiso en administraciones anteriores”. Hubo “cierta flexibilidad” en estos llamados, pero “esa flexibilidad va a ir disminuyendo”, aseguró el director de Higiene.
Américo afirmó que lo que se busca evitar es “que se hagan las cosas al revés”, citando como ejemplo que “se estarán inaugurando restaurantes, muy prontito, que no han iniciado siquiera una habilitación formal de su local. También se instalan carros sin la debida autorización”, dijo Américo, a lo que Ostuni ratificó que “eso queremos ordenarlo, y que el espacio público no sea tierra de nadie. La ciudad es de todos y hay que respetarla”.