Policiales | 03 Nov Dos trabajadores sexuales permanecen detenidos desde ayer en dos dependencias policiales, acusados de haberle hurtado dinero a un cliente en un hotel de alta rotatividad. La denuncia fue radicada ayer por la mañana y el episodio ostenta características inverosímiles.
De acuerdo a información extraoficial obtenida por EL TELEGRAFO, la investigación comenzó cuando un hombre se comunicó con la Seccional Segunda desde un motel de la zona norte de la ciudad. El denunciante aseguró que dos travestidos le habían hurtado dinero, así que los efectivos se trasladaron hasta el lugar y detuvieron a los tres involucrados.
En la comisaría la víctima dijo que esa noche se trasladó a un bar ubicado en la zona oeste de la ciudad, donde contactó a dos trabajadores sexuales (travestis). Ya sobre las 6 de la madrugada, los invitó a continuar la velada en un motel y ellos le solicitaron 1.000 pesos a cambio del servicio.
Él accedió y los tres se trasladaron a un motel de la zona norte, donde durante horas mantuvieron relaciones sexuales, usufructuaron el jacuzzi (hidromasaje) y consumieron bebidas y snacks.
Dijo que luego se quedó dormido, pero al despertar –próximo a las 9 de la mañana- notó nerviosismo en sus acompañantes, así que inspeccionó los bolsillos de su pantalón y notó que le habían hurtado 10.000 pesos, por lo que inmediatamente se comunicó con la Policía.
En la comisaría, los travestis –de 30 y 32 años-- admitieron haber prestado servicios sexuales al denunciante, pero negaron haberle robado. No obstante, la Justicia dispuso que permaneciesen detenidos en distintas seccionales.
Poco después, el que permanecía en la Seccional Segunda optó por confesar y mostrarle a la Policía dónde había ocultado el dinero, en tanto el otro siguió insistiendo en que no advirtió tal maniobra. Hoy ambos comparecerán ante la Justicia y seguramente trascenderán más detalles de un episodio con detalles inverosímiles.