Policiales | 18 Nov Fue procesado ayer el sujeto de 24 años que el miércoles de la semana pasada rapiñó a un remisero en la zona de Montevideo y Almagro. Tras ser detenido en Mercedes, el delincuente compareció en la sede judicial de nuestra ciudad, donde brindó nuevos detalles de sus últimas andanzas.
Como adelantáramos en base a información extraoficial, el miércoles 10 de noviembre, próximo a las tres de la madrugada, los efectivos de la Seccional Primera de Policía fueron notificados sobre una nueva rapiña perpetrada en perjuicio de un remisero. La víctima, de 42 años y empleado de una remisería ubicada en la zona de Bulevar Artigas y República Argentina, dijo a los investigadores que sobre las 2 y 30 de la madrugada permanecía estacionado en la zona de República Argentina y Joaquín Suárez cuando un sujeto de entre 18 y 20 años se acercó al vehículo y solicitó traslado. El “cliente”, vestido con pantalón deportivo gris y buzo oscuro, pidió que lo llevara hasta Montevideo y Park Way.
Cuando el vehículo se dirigía a destino, se cruzó con otro móvil, cuyo chofer intentó ver el rostro del pasajero, pero éste hizo un rápido movimiento para ocultarse. Convencido de que sucedía algo extraño, se comunicó con la remisería y allí le informaron que el móvil se dirigía hacia la zona sur de calle Montevideo, por lo que decidió dirigirse inmediatamente al lugar.
En ese momento, en las inmediaciones de Montevideo y Almagro, el sospechoso cliente recomendó al chofer detenerse por allí, ya que -según dijo- el barrio era peligroso y no le convenía adentrarse más. Cuando el remisero detuvo la marcha, el sujeto le colocó un cuchillo de cocina en el cuello y le exigió el dinero. La víctima entregó los 50 pesos que llevaba en la billetera, pero el atracador pidió más, así que le entregó algunas monedas hasta completar unos 140 pesos.
En ese momento, cuando el delincuente ya se daba a la fuga, arribó el otro chofer, quien se acercó a su colega y le preguntó qué había sucedido. Éste le dijo que acababan de rapiñarlo, pero también le advirtió que el fugitivo llevaba un cuchillo. Igualmente lo persiguió hasta la zona de 19 de Abril y Park Way, pero el sujeto logró escabullirse hacia un complejo de viviendas precarias.
Comienza la investigación
Gracias a la descripción aportada por los choferes, los investigadores intuyeron que el rapiñero no era otro que Pedro Wilmar Paz Gallo, de 24 años, poseedor de antecedentes penales y habitual cuidacoches en la zona de Avenida España y Juncal. Al otro día, con una orden de allanamiento expedida por la Justicia, allanaron varias viviendas en la zona sureste de la ciudad, pero no pudieron dar con el fugitivo. De todas formas, notificaron a seccionales de otros departamentos y el lunes 16, en horas de la tarde, recibieron noticias: la Policía de Mercedes lo tenía bajo custodia.
Una vez trasladado a Paysandú, Paz Gallo confesó rápidamente la autoría del ilícito y brindó detalles de una ajetreada noche de miércoles. Según relató, esa noche salió de su domicilio con intenciones de cometer algún robo, pero en primera instancia se trasladó hasta las inmediaciones de una pizzería ubicada en Avenida España y Juncal, donde ofició varias horas como cuidacoches. Ya sobre la 1.30 de la madrugada, abandonó su puesto y caminó hacia el Este por Avenida España, hasta llegar a los alrededores de un negocio de venta de neumáticos. Deseaba obtener dinero para comprar vino, comida y “algún porrito”, así que tomó una baldosa y destrozó la vidriera del local, pero la alarma se activó y debió abandonar rápidamente el edificio, lastimándose un dedo de la mano.
Caminó hasta República Argentina y Joaquín Suárez, y allí le solicitó a un taxista que lo llevara hasta la zona sur de calle Montevideo.
Antes de llegar a destino amenazó al chofer con un cuchillo y lo despojó de una pequeña suma de dinero, pero cuando huía fue perseguido por otro remisero, hasta que finalmente logró ocultarse entre las viviendas precarias de la zona. Allí permaneció oculto durante horas y posteriormente fue hasta la casa de un conocido, donde descansó un rato más para luego dirigirse a Ruta 3, donde pidió “tiraje” hacia Mercedes, ya que intuía que la policía andaba tras él. Los efectivos de la Seccional Primera allanaron la vivienda donde Paz pasó la noche del miércoles 10 de noviembre y recuperaron el pantalón gris que usó en la rapiña.
Poseedor de antecedentes penales por delitos como violencia privada y daño especialmente agravado, Paz Gallo compareció nuevamente ayer ante la Justicia, en cuya órbita resultó procesado con prisión por un delito de rapiña.