Rurales | 25 Nov Las pérdidas en las cosechas ocasionadas por las constantes lluvias torrenciales que impiden el ingreso de las máquinas a las chacras en gran parte del litoral, son cuantiosas, no vislumbrándose hasta el momento una solución de acuerdo a los pronósticos que anuncian más precipitaciones para los próximos días.
Como referencia a lo acontecido hasta el momento, en ciudad y alrededores hasta la víspera la lluvia en el mes de noviembre asciende a 262 milímetros, pero desde el 13 a la fecha, prácticamente han sido muy pocos los días sin agua, factor determinante para la detención de las tareas en las chacras.
En las últimas horas el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, ingeniero agrónomo Andrés Berterreche, afirmó que el gobierno ve con preocupación la situación porque se estaba en camino de lograr una “excepcional cosecha de cereales de invierno y con estas lluvias se está dificultando un operativo que venía muy bien”.
El jerarca afirmó a radio Carve que las pérdidas podrán ser importantes en algunos casos porque la sucesión de exceso de humedad y temperatura provoca el surguimiento de microorganismos --sobre todo hongos-- que afectan la calidad del grano.
Afirmó que se realiza un monitoreo constante pero explicó que a la fecha no es posible tener un panorama completo de la situación porque las lluvias continúan y la situación “puede empeorar”.
El ministro señaló que hasta que terminen las lluvias y se pueda orear un poco el campo para comenzar la cosecha, es difícil tener una evaluación total y ver los verdaderos daños.
Pese a la disminución, si se comienza pronto a cosechar se tendría una producción “interesante” con una buena evaluación de kilo por hectárea, pero como es posible que las lluvias continúen es también probable que las expectativas sigan cayendo.
El jerarca dijo que es difícil evaluar a esta altura del proceso un eventual aumento en el precio de la harina. “Es difícil pensar en esa situación cuando las expectativas eran de 1.500.000 toneladas y solo la tercera parte se consume en el país. Por esa vía no creemos que haya problemas de abastecimiento de trigo”, puntualizó Berterreche.
Arroz
El Presidente de la Asociación de Cultivadores de Arroz, Tabaré Aguerre, dijo a El País que hasta antes de las lluvias se estaba sembrando a pesar de las dificultades de la sequía; pero las lluvias interrumpieron la actividad y no se pudo terminar de hacerlo.
En algunas zonas, como en el este del país, “no hay limitante de agua”, aunque sí hay dificultades para llegar a las chacras.
“La situación cambió drásticamente y es un poco compleja. De poder plantarse los primeros días de diciembre, si para de llover y arriesgando a producir menos, se podría llegar a plantar. Pero de seguir lloviendo el área de siembra se va a ver reducida a lo que se ha sembrado hoy”.
También le preocupa al gobierno, pero menos. Y menos que en agosto pasado cuando solo el 30% de los embalses estaban cubiertos de agua. El ministro explicó que en ese entonces se tenía una afectación “muy fuerte en lo que se refiere a reservas de agua, pero eso se solucionó”.
Si bien afirmó que se debe esperar a ver la situación, Berterreche dijo que lo sembrado es más que lo que se habría sembrado si no se tuviese agua.
Finalmente, el secretario de Estado explicó que Ganadería tiene un fondo de emergencia agropecuaria --aprobado durante esta administración-- para ayudar a los productores familiares en caso de urgencias.
Aclaró que no se puede salir corriendo detrás de cada problema puntual porque no es la forma de hacer políticas agropecuarias, sino que las medidas deben ser tomadas para el conjunto del sector.