Rurales | 08 Dic Al haberse conmemorado 30 años de la creación del Laboratorio Regional Noroeste de la Dilave “Miguel C. Rubino”, hoy a las 11.30 en el Centro Universitario de Paysandú, calle Montevideo 1028, se desarrollará un breve acto protocolar con la presencia de autoridades locales y nacionales.
Posteriormente, efectuarán la presentación de “La casuística regional anual” y luego habrá un brindis en el Centro Médico Veterinario de Paysandú.
Será recordado el primer encargado del laboratorio, el doctor Francisco Haedo. Se presentará lo que sucedió el último año, la casuística, las enfermedades y todas las novedades surgidas durante 2009.
Su responsable en Paysandú, el doctor Rodolfo Rivero, manifestó a EL TELEGRAFO que el laboratorio en los últimos tiempos “ha mejorado en calidad e integrado a nuevos profesionales, que era una de las problemáticas que tenía la institución y el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), a nivel nacional”.
Sostiene que “es un momento de balance y proyectar al futuro. Nosotros al igual que otros colegas tenemos 30 años dentro de la institución y debemos pensar en el futuro y la generación de otras cosas”.
El laboratorio ubicado en el ingreso a la ciudad, en la zona del Trébol, cuenta hoy con ocho funcionarios, de los cuales cinco son técnicos (médicos veterinarios) y tres, ayudantes. En el área de Parasitología trabaja Esthela Quintana, Edgardo Giannechini en Bacteriología, Adriana Zabala en Brucelosis y en Patología, Carolina Mattos y Rodolfo Rivero. Los ayudantes técnicos cumplen la variada función de asistencia en las diferentes partes. Son Marcelo Bottino, Soledad González y Beatriz Fábregas.
El laboratorio tiene como objetivo “determinar la epidemiología, la incidencia económica y realizar los controles de las enfermedades que están prevaleciendo en la región”, sostuvo el profesional sanducero.
También el apoyo a las campañas sanitarias, como es el caso de la brucelosis y tuberculosis. El apoyo a los colegas fue resaltado por el doctor Rivero.
“El aspecto sanitario, problemas de mortandad y clínicos son ámbitos de consulta y de procesamiento de materiales de muestra según los requerimientos”.
Subrayó que “estamos mejorando últimamente en el trabajo de difusión con una base de datos reciente en donde podemos proyectar, evaluar y cuantificar las enfermedades de una manera científica y estadística”.
Agregó la formación de recursos humanos, “como recibir estudiantes o aquellos que quieren aprender una técnica determinada, tesis de grado o posgrado”.
“Los laboratorios de diagnóstico deben tener un porcentaje de investigación, porque si hay un problema se debe analizar qué está sucediendo, cómo afecta, cómo se puede controlar y comprobar qué es lo que está produciendo la enfermedad”, dijo Rivero.