Policiales | 27 Dic Una situación ficticia tuvo en vilo por varias horas a personal de la Seccional Quinta, cuando en la medianoche del 24 de diciembre un llamado les alertó sobre la presencia de personas extrañas que pretendían ingresar a una estancia, ubicada a unos 15 kilómetros de Constancia. De acuerdo a información extraoficial obtenida por EL TELEGRAFO, próximo a las 23.50 del jueves el capataz de una estancia solicitó ayuda a la Policía porque el sereno --un joven de 18 años-- le había avisado que, al parecer, delincuentes querían ingresar a la casa y le habían efectuado varios disparos.
De inmediato, la Policía acudió al lugar, donde constató la rotura de un vidrio en la cabina de un tractor, pero no lograban dar con el paradero del casero.
Tras una intensa búsqueda por el campo, hallaron al sujeto caído --a unos 350 metros del casco de la estancia-- boca abajo y sin ropa bajo un árbol, aparentemente lesionado y en estado de alteración nerviosa. Rápidamente lo trasladaron al servicio de urgencias de Comepa, donde se constató que no había sufrido ninguna lesión, por lo cual el caso comenzaba a sonar extraño. Una vez repuesto, el muchacho relató minuciosamente que desconocidos habían disparado contra el tractor en el cual él se encontraba escuchando música y que luego lo habían golpeado, desnudado e intentado secuestrarlo.
la historia real
En las primeras horas del 25 de diciembre, efectivos de la Seccional Quinta retornaron a la estancia para buscar indicios que --con la luz del día-- les permitieran dilucidar el hecho. Encontraron dentro del tractor una vaina de un proyectil calibre .22, lo cual indicaba que el disparo se había efectuado desde adentro del tractor y no desde afuera.
Ante esto, el casero fue nuevamente interrogado y terminó admitiendo que se encontraba escuchando música en la cabina del tractor manipulando un rifle y que en determinado momento efectuó un disparo que impactó en el vidrio y por temor al castigo de sus patrones, simuló el ataque. Extraoficialmente se supo que no hubo denuncia penal por los damnificados, por lo que el joven recuperó su libertad.