Rurales | 11 Ene La venta de vino a granel, una modalidad de exportación que en 2008 representó la colocación de más de 12 millones de litros, se reanudó recientemente en un operativo con la participación de 16 bodegas de Uruguay, concretándose la venta de 600.000 litros de vino a México.
A partir del operativo coordinado con la participación de 16 empresas de plaza se logró consolidar un volumen de 600.000 litros de vino con destino a México, compuesto por 120.000 litros de vinos blancos y 480.000 de vinos tintos, aseguró el supervisor técnico del embarque, Victorio Breganti.
El sábado 2 partió el primero de una serie de embarques que completarán el volumen vendido a razón de cuatro contenedores por semana en promedio, dependiendo de las necesidades de los importadores.
En cuanto a su precio, Breganti dijo que se trata de un vino de calidad de mesa que se comercializa como materia prima a un precio de U$S 0,30 libres el litro. Si bien el precio no es todo lo atractivo que se puede esperar, este tipo de operativos contribuye a catalizar los posibles desequilibrios en el mercado interno como consecuencia del aumento del stock.
En cuanto al mercado de destino, México es una plaza relativamente nueva para los vinos uruguayos y ha comprado tradicionalmente vino envasado. Este es prácticamente el primer embarque a granel en estos volúmenes. Al 30 de noviembre de 2009, las exportaciones de vino a México alcanzaban a 173.579 y representaba el quinto importador detrás de Brasil, Estados Unidos, Polonia y Canadá, de acuerdo con cifras oficiales.
RECUPERACIÓN
Con este embarque a México se retomaron las exportaciones a granel luego que en 2009 las condiciones climáticas hicieran estragos en la producción. La cosecha 2009 sufrió las consecuencias, primero de una severa helada en 2008 y luego de la sequía que se extendió en los primeros meses de 2009, lo que hizo que se perdieran unos 40 millones de kilos de uva que equivale a 35% de la producción.
Eso determinó que se pasara de tener un sobrestock a abastecer apenas el mercado interno. A esto se agrega la caída de mercados fundamentales para el vino a granel como es Rusia, al que en 2008 se vendieron 12 millones de litros.
Es importante señalar que Argentina también perdió una parte importante de la cosecha por razones climáticas, por lo que tampoco allí Rusia podía conseguir vinos. Por otra parte, con la crisis surgió nueva oferta como es el caso de los vinos de España que salió a colocar su excedente a un precio más competitivo.
PERSPECTIVA
Para 2010 se perfila una producción promedio del orden de 120 a 130 millones de kilos de uva, dependiendo del comportamiento del clima en los próximos meses.
El mercado interno absorbe entre 75 y 80 millones de litros anuales, lo que equivale de 100 a 110 millones de kilos de uva. Sin embargo, Breganti advirtió que para el cálculo del excedente exportable no sólo se debe medir el saldo de uva restante, sino que se debe tomar en cuenta el posible stock que siempre hay en el país y que aún no está precisado. Además, no todo tiene fines de exportación ya que muchas empresas tienden a mantener una cantidad disponible en el país.
De todos modos, este año se presenta con una perspectiva mucho más auspiciosa que 2009 y con la posibilidad de retomar los operativos que permitieron reducir el sobrestock en 2008 y que presionaba a la baja los precios internos.
De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi) al 27 de diciembre pasado, mientras en 2008 las exportaciones medidas en términos de volumen totalizaron 2.216.937 de litros, en 2009 las colocaciones al exterior fueron de 1.754.677, lo que equivale a una caída de casi 21%.
En términos de divisas, y tomando la misma fecha de cierre, las exportaciones en 2008 representaron un ingreso de US$ 6.900.498, mientras que en 2009 el sector ingresó 5.823.072. Esto equivale a una reducción de 15,6% del ingreso de divisas.