Paysandú, Viernes 15 de Enero de 2010
Opinion | 14 Ene Aunque en la actual gestión de gobierno se le cambió el nombre, el denominado anteriormente “Verano Solidario” y ahora “Verano Educativo” se ha convertido en una oportunidad para muchísimos niños, que luego de terminar las clases cuentan con pocas opciones de recreación y esparcimiento.
No es menor tampoco el hecho de que este programa brinde desayuno y almuerzo, puesto que muchos de esos niños reciben estos servicios en la escuela durante el año lectivo.
En Paysandú son nueve las escuelas que participan en esta nueva edición del programa, mientras que a nivel nacional se desarrolla en 291, con el objetivo de disminuir el fracaso escolar y solidificar los aprendizajes, beneficiándose un total de 28.000 niños con el programa pedagógico, mientras que unos 10.000 concurren solo en los horarios donde se ofrece el servicio de alimentación.
El programa prioriza el trabajo pedagógico en el área de lengua y el cálculo, la convivencia y estrechamiento de vínculos y comunicación a través de la participación de los niños en diferentes actividades recreativas.
A diferencia del año pasado, esta vez Primaria dispuso que para poder elegir cargos en el Verano Educativo los maestros debían presentar un proyecto de trabajo pedagógico, apuntando a darle más peso al contenido educativo que al asistencial. Y este es un avance importante, porque permite optimizar la performance de los niños para cursar el año siguiente, en la medida que jugando se siguen entrenando en habilidades como la lectura y las matemáticas, asignaturas que ofrecen las mayores dificultades a los estudiantes de todos los niveles.
Las propuestas hacen también mucho énfasis en la recreación y el aspecto lúdico, lo cual es fundamental, porque al fin de cuentas los niños están de vacaciones. Y si algo más tiene de bueno es que evita que muchos niños de los contextos denominados “críticos” no terminen en la calle en vacaciones, lo cual no es poca cosa.
En definitiva, se trata de un programa que si bien se ha consolidado a través del tiempo y con sucesivos cambios de gobierno, debería seguir existiendo hacia el futuro porque viene a llenar en vacaciones y para miles de niños el vacío que ha dejado su tiempo de socialización y aprendizaje en la escuela.
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