Locales | 22 Ene Pese a que todavía hay zonas con agua debido a la crecida y las lluvias, no se ha detectado un número por encima de lo normal de casos de enfermedades propias de la estación, como diarreas, problemas gastrointestinales, hepatitis, otitis y afecciones de la piel, destacó a EL TELEGRAFO la licenciada Olga Rodríguez.
En lo que respecta al monitoreo de situaciones propias de la temporada, explicó la referente epidemiológica que dadas las inundaciones, los desbordes y agua acumulada, con zonas que están todavía anegadas “porque llueve y el agua no termina de irse, no se han dado igualmente enfermedades esperables, como es particularmente la leptospirosis y la hepatitis, que pueden verse muy favorecidas por estas condiciones”.
Significó la entrevistada que “afortunadamente no hemos tenido brotes, pero sí hemos tenido pacientes en estudio, en observación, con extracción de sangre para laboratorio y no hemos tenido casos”.
Tampoco se han registrado casos por encima de lo normal en cuanto a afecciones diarreicas u otitis, que generalmente se dan en esta época del año, y ello se debe en buena medida a que no se han habilitado las playas debido a la creciente, expresó la entrevistada, quien subrayó que los índices de infección “son menores a los de años anteriores. Creemos que al no haber playas se ha favorecido que hayan disminuido los casos, y lo mismo ha ocurrido con las alergias de piel, que son frecuentes debido a las algas del río cuando el nivel está muy bajo y se estanca. En las otitis, las enfermedades gastrointestinales, los cuadros de vómitos, de dolores digestivos, de diarreas, este año por suerte y hasta el momento con el río crecido, estamos por debajo de lo habitual”, evaluó la entrevistada.