Paysandú, Miércoles 27 de Enero de 2010
Deportes | 25 Ene Su cara lo decía todo. No le encontraba una explicación lógica a lo que sucedió en la cancha, por lo que se hizo difícil poder entablar un diálogo en caliente con Ulises Betti. Por eso el paso de las horas podría dejar un balance más claro de lo que sucedió en el clásico, y sería importante conocer el pensamiento del técnico de la selección de Paysandú luego de haber reflexionado con la almohada.
“Primero que nada puedo decir que nos hicieron tres goles y nos pudieron haber convertido más. Salto fue totalmente superior a nosotros en todo momento. No tuvimos ni siquiera rebeldía como para dar vuelta eso más allá de que lo intentamos con alguna variante para el segundo tiempo. Podríamos haber empatado en ese momento pero, sinceramente, desde afuera veía que era más probable que nos convirtieran el segundo gol, que nosotros llegáramos a la igualdad”, dijo Betti en la tarde de ayer en contacto con EL TELEGRAFO.
La voz del técnico lo decía todo. “Mañana (hoy) vamos a hablar muy bien sobre lo que pasó. Los jugadores están mal, sorprendidos por este momento. ¡Es que Salto parecía el local!”.
En el intento de buscarle la quinta pata al gato el entrenador reflexionó respecto a que “no tenemos jugadores que desequilibren como por ahí sí los tiene Salto. Pero a nosotros nos falta actitud, perdemos cada pelota dividida, no ganamos por arriba y cometemos desatenciones permanentes. Parecía que hasta teníamos miedo de tomar las marcas cuando sabíamos que la pelota podía ir para determinado sector. No sé qué pasa”. Betti no solo pensó en la realidad del equipo. Con vergüenza, aseguró que el rendimiento de Paysandú “fue una cachetada a la gente, porque veníamos hablando de que era el momento de demostrar, y que la gente volviera a la cancha. Y lo único que le dijimos fue ‘no vengan más’. Había mucha expectativa, con la gente apoyando e hicimos todo al revés. En lo personal, lo único que tengo que decir es pedirle perdón a la gente por el apoyo para este equipo que no logró plasmar nada”. Pero hay que dar vuelta la página más allá de lo sucedido. Es que el tiempo que queda para el choque ante los mercedarios es muy poco, y el miércoles habrá que jugarse la ropa en pos de la clasificación. Y, en tal sentido, Betti compartió la idea de que habrá que darle la oportunidad a otros que esperan salir a la cancha. “Sí, hay que cambiar de nombres, porque fueron muy pocos los que se salvaron el sábado. Hay que darle la posibilidad a jugadores que están esperando. Este es el momento de que puedan mostrarse.
Ahora queda hablar mucho y mentalizar a los jugadores que todavía no han saltado a la cancha”. El técnico sanducero afirmó que “el objetivo es ganar el miércoles y clasificar. Pero si no acomodamos algunas cosas se va a venir el final en cualquier momento. Porque ¡no damos cuatro pases seguidos! Y no porque no se haya hablado… Parece que tenemos miedo a hacer. Lo que está claro es una cosa: peor que el sábado no podemos jugar. Hay que entender que ese es el piso, y de ahí tenemos que crecer”.
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