Policiales | 21 Ene La Justicia Penal procesó en las últimas horas a un individuo de 50 años, poseedor de varios antecedentes penales, que el pasado fin de semana agredió brutalmente a su madre de 83, provocándole graves heridas en el rostro. La víctima radicó la denuncia en la Unidad Especializada en Violencia Doméstica de la Policía y posteriormente el salvaje agresor fue detenido en la ciudad de Salto y trasladado a nuestra ciudad.
Según información extraoficial obtenida por EL TELEGRAFO, el pasado domingo, próximo a las 14.30, se presentó en la referida repartición una señora de 83 años, visiblemente lesionada en el rostro, quien denunció que su hijo, Diego Raúl Cóceres Rodríguez, de 50 años, la había agredido brutalmente en su propia casa. Relató que ese viernes, alrededor de las 23.30, mientras se encontraba sentada en su cama, su hijo ingresó en la vivienda y comenzó a insultarla. El sujeto cerró puertas y ventanas para evitar que pidiera ayuda y la tomó a golpes de puño, para luego armarse con un hacha y amenazarla de muerte. La anciana suplicó por su vida y el atacante finalmente dejó de golpearla, pero la mantuvo encerrada durante horas para que no radicara la denuncia. Luego de perpetrado el cobarde ataque, la llevó hasta la casa de una de sus hijas y la dejó allí, alegando que las heridas que presentaba se debían a una caída.
La denunciante fue examinada en un centro de Salud donde le diagnosticaron “enorme hematoma periorbitario bilateral y hematomas en brazos”.
Según se desprende de las primeras averiguaciones, Cóceres se separó recientemente de su esposa y desde entonces vive junto a su madre, a quien insulta permanentemente y amenaza con despojarla de su casa. Asimismo, le hurtó dos garrafas de 13 kilos que luego vendió, lo que obligó a sus otros hijos a comprar nuevas. Notificada la Justicia de Feria, dispuso la inmediata detención del agresor, pero éste permanecía en la ciudad de Salto. El lunes, próximo a las 9, fue capturado por la policía salteña y derivado a nuestra ciudad, donde, interrogado, insistió en que las heridas de su madre obedecían a una caída. No obstante, gracias a aclaraciones de varios testigos, la Justicia reunió suficiente evidencia para procesarlo con prisión por un delito de lesiones personales especialmente agravado, en calidad de autor. Cóceres fue procesado en varias oportunidades por diferentes delitos. En 1982 por lesiones ordinarias, en el 82 por hurto, en el 83 por atentado, en el 87 por daños, en el 89 por amenazas y violencia privada, en el 92 por apropiación indebida y en 2007 por hurto.
Éste es el tercer procesamiento con prisión en el presente mes por este tipo de delito, todos como corolario de denuncias radicadas en la Unidad Especializada en Violencia Doméstica, actualmente a cargo del subcomisario Milton Barboza.