Locales | 15 Feb La empresa Indisur se ha constituido en el proyecto Biopay, a efectos de cumplir con la iniciativa de instalar una planta de biodiesel en Paysandú, para lo cual ha reformulado el proyecto inicial de 2008 a efectos de una actualización, con la expectativa de que el nuevo ministro de Industria, Energía y Minería autorice la instalación en base a una declaratoria de interés nacional. El Ing. Enrique Fernández, titular de la empresa, destacó a EL TELEGRAFO que a quince días de la instalación del nuevo gobierno se han establecido contactos para acelerar el proceso de aprobación del proyecto, pero consideró que evidentemente se han dado prioridades para ALUR que han sido determinantes para que se demore la aprobación, en tanto avanzan las instancias para que la empresa subsidiaria de Ancap participe activamente en la mezcla, sin que por ahora sean incluidos los privados. En el caso de Biopay, la iniciativa ha sido actualizada a enero de 2010, ante el escenario que se ha dado en el país desde que se decidió llevar adelante la mezcla con biocombustibles, y se ha establecido una capacidad de producción de 10.000 litros diarios, con perspectivas de instalar la planta en el parque industrial de Paysandú.
Tiene como destino principal “la planta de Ancap de Paysandú, para ser mezclado en las proporciones fijadas por la ley: 5, 10 y 20 por ciento según el año de su fabricación”, en tanto recordó que “se establece en el artículo 3º de la ley que la producción de biodiesel y comercialización y/o exportación no podrá ser efectuada por Ancap”.
Además de contarse con la declaratoria de interés departamental, “este proyecto cumple en un todo con las leyes Nros. 18.195 de Agrocombustibles del 28 de noviembre de 2007, y su reglamentación, ley 1545/08 del 27 de octubre de 2008, y la norma 1100 de UNIT”.
La maquinaria de la planta se importa desde la fábrica Bioenergy en Resistencia, Chaco, Argentina, en contenedores, lo que permite su más ágil y rápida puesta en marcha. La elaboración se hará en base a semillas oleaginosas, como el girasol que se adquiera a los productores de la zona y eventualmente importación, con un proceso integral, es decir prensado para obtener el aceite, mezcla con metanol en el reactor y su posterior lavado y secado para su análisis, almacenamiento y distribución, explicó.
Apuntó que por la ley mencionada, el máximo que se puede vender o utilizar para autoconsumo o flotas cautivas es de 4.000 litros diarios, por lo que el excedente del producido debe ser comercializado a Ancap o para la exportación.
Quedarán como productos secundarios el expeler que se usará en forma de tortas para alimento del ganado, y el glicerol, que puede ser usado tanto por UTE como en la planta de cemento de Ancap u otros altos hornos, según sus necesidades, apuntó. La inversión se hará con fondos propios y ronda los 300.000 dólares, precisó Fernández.