Paysandú, Miércoles 24 de Febrero de 2010
Locales | 21 Feb Cuando Jenny se despertó en la madrugada apenas tuvo tiempo para salir con su familia de la modesta vivienda que habitaba casi al borde del arroyo La Curtiembre en su intersección con avenida Dr. Roldán. Todo lo que tenía se fue con su “rancho” que fue literalmente arrastrado por el agua. Otra vivienda de similares características también resultó destruida por la fuerza de la correntada.
“Perdimos todo: la ropa, los colchones, estoy a la intemperie y no tengo nada”, lamentó. Junto a ella viven dos menores y otros tres adultos.
En la mañana de ayer el panorama de esta zona de La Curtiembre y Dr. Roldán era desolador. Muy cerca de allí, está la vivienda de Beatriz, tía de Jenny. Le entró más de medio metro de agua y se le mojaron todas sus pertenencias. Perdió varios objetos personales y cuando paró de llover se puso a limpiar lo que quedó pero todo estaba mojado y no se podía usar.
“Lo único que nos quedó de ropa fue un calzoncillo...el ropero se mojó y se hinchó y no lo podemos abrir, tendremos que romperlo”, dijo lamentando aún más que su sobrina lo hubiera perdido todo. “Ella quedó sin nada y hasta ahora nadie se presentó a ayudarnos”, relató en horas de la tarde.
Ambas mujeres dijeron haber denunciado su situación a la Seccional Quinta y esperaban ser auxiliadas de alguna manera. Sin embargo, aún sin un lugar donde dormir, Jenny dijo a EL TELEGRAFO que no quería ir al centro de evacuados aunque tampoco sabía dónde pasaría la noche con los niños.
Su tía, en cambio pidió “si alguien puede brindarme un lugar para alojarme. No quiero que me den, ni quiero agregarme, quiero un lugar con un alquiler que pueda pagar porque yo trabajo. Un galponcito aunque sea, pero en otro lugar, a donde no le llegue el agua. Mi hija está en tercer año de liceo y quiero que siga; entre nuestra pobreza la estamos educando lo mejor que podemos”, dijo al pedirnos que incluyéramos en este artículo su dirección, Roldán 2527.
En la misma zona, otra vecina perdió su “chancha” con varias crías. Apenas pudo salvar cuatro lechones.
Dramas personales y familiares como estos hay muchos. Para conocerlos alcanzaría con hablar con cada uno de los más de ochenta evacuados.
CIENTOS DE AFECTADOS
Por otra parte, en varios barrios de la ciudad las intensas lluvias de la madrugada del sábado también dejaron un reguero de pérdidas y lamentos. En el barrio IC, ubicado en Bulevar Artigas y Park Way, varias viviendas resultaron anegadas, con más de medio metro de agua en su interior. En las inmediaciones del Centro de Peluqueros también hubo anegamientos e inundaciones por el desborde del arroyo Sacra. El puente de acceso al Parque Municipal no se podía usar porque casi lo tapaba el agua. La “Casita” del parque resultó inundada y una pesada máquina de la Intendencia que allí había, quedó atrapada en el cauce desbordado y furioso.
En la zona de Tacuarembó entre Carlos Albo y Entre Ríos una vecina que tiene un pequeño vivero sufrió pérdidas totales del mismo y anegamiento de su vivienda. El vivero es su fuente laboral, pues comercializa los plantines en la feria.
Allí el problema fue un terreno baldío lindero que ofició como represamiento e hizo que la correntada ingresara al vivero y la casa de la desesperada mujer, que se encontró con el agua hasta la cintura. Pide una solución porque el problema radica en el terreno lindero que está sucio y abandonado.
Las pérdidas materiales fueron cuantiosas para mucha gente y el efecto de la lluvia pegó duro en los barrios más humildes. Los rostros cansados y preocupados de muchos vecinos sanduceros afectados atestiguan que fue mucho más que cosas materiales lo que se llevó el agua.
BARRIO NORTE Y NUEVO PAYSANDÚ SIN AGUA
Aunque suene paradójico, en otros lugares de la ciudad los vecinos estaban preocupados por la falta de agua: Nuevo Paysandú y Barrio Norte quedaron sin agua potable desde la madrugada del sábado debido a la rotura de una tubería que resultó arrastrada por la crecida del arroyo La Curtiembre. Anoche sobre las 20.30 una vecina de barrio Norte alertó a nuestra Redacción sobre la situación y al realizar la consulta en esferas de OSE, nos informaron que se trata de una tubería que estaba ubicada en avenida Dr. Roldán junto al arroyo La Curtiembre y fue arrastrada por sus aguas. El arreglo resultó complejo debido al cruce de una tubería de gas en el lugar. No obstante, se informó que la cuadrilla que trabajaba en el lugar no se retiraría de allí hasta dejar solucionado el desperfecto.
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