Policiales | 24 Feb La Justicia procesó con prisión a una mujer de 33 años, poseedora de antecedentes penales, que dio muerte a su bebita recién nacida. El terrible suceso ocurrió el lunes cuando la mujer se dirigió al gabinete higiénico de su trabajo señalando que se sentía mal. Allí pasó un largo rato hasta que dio a luz sin asistencia alguna, posteriormente asfixió a su hija y ocultó el pequeño cuerpo en el interior de su mochila. Según trascendió, la mujer transitaba el octavo mes de embarazo, sin embargo nadie de su entorno laboral tenía conocimiento de su estado de gravidez.
Según información extraoficial, la mujer trabajaba junto a su concubino en un frigorífico local, aunque en diferente sección, y su embarazo logró pasar desapercibido debido a que ocultaba su vientre detrás de una holgada túnica.
Según pudo saberse, el lunes comenzó a sentir fuertes contracciones por lo que solicitó permiso a su encargada de sección para dirigirse al baño, ya que no se sentía bien. Ana Carolina Torrens Miranda se demoró unos cuantos minutos en el retrete, por lo que dos compañeras llegaron hasta allí, avistando que por debajo de la puerta había una importante cantidad de sangre. Torrens les dijo que había sufrido un considerable retraso de su período menstrual por lo que les pidió que le acercaran su mochila para extraer elementos de higiene personal, a lo que las mujeres accedieron inmediatamente. La mujer continuó en el baño por más de una hora y cuando por fin salió se dirigió a su superior expresando que estaba indispuesta. Así las cosas, en compañía de su pareja fue trasladada por un chofer del establecimiento al servicio de emergencias de Comepa, desoyendo el pedido de la mujer que insistía en que simplemente la llevara a su casa para descansar.
Por su parte, personal de la Seccional Cuarta tomó conocimiento acerca del ingreso de una mujer de 33 años al mencionado servicio asistencial, quien al parecer se habría practicado un aborto. Inspeccionada una mochila que portaba, pudo constatarse que en su interior se encontraba el cuerpo sin vida de una recién nacida, el que examinado por el forense reveló que había nacido viva, producto de un embarazo a término y cuyo deceso devino por asfixia.
Indagado el concubino de la pérfida mujer, de 25 años, expresó que tenía conocimiento del embarazo pero que su compañera no quería que la criatura naciera en las condiciones en que se encontraban viviendo. Extraoficialmente se supo que la mochila contenía además del cuerpito de la criatura, la placenta y el cordón umbilical, así como un termo y un mate y que la bebé tenía abundante papel dentro de su cavidad bucal con el que su madre le habría provocado la asfixia.
El procedimiento fue llevado adelante por personal de la Dirección de Investigaciones y de la Seccional Cuarta con participación de Policía Técnica.
La Justicia, por su parte, dispuso la comparecencia de los testigos e involucrados y la evaluación de antecedentes penales, continuándose en esa órbita las averiguaciones. Ayer, luego de tomar declaraciones, el juez de turno resolvió el procesamiento con prisión de Ana Carolina Torrens Miranda por un delito de homicidio especialmente agravado. La mujer --que aún permanece internada con custodia policial-- cuenta con antecedentes penales por un delito de similares características acaecido en noviembre de 1999, oportunidad en la que también incurrió en un delito de homicidio especialmente agravado.