Policiales | 22 Feb La Dirección de Investigaciones incautó gran cantidad de muebles, prendas de vestir, electrodomésticos, dos motos y otros efectos, en el marco de actuaciones relacionadas al reciente procesamiento de Juan José Noble Barboza (alias “Pusuca”), autor de un homicidio en 1995 y de dos violentas rapiñas en los últimos meses. Como informáramos en base a datos extraoficiales, una exhaustiva investigación policial concluyó días atrás con la detención de Noble Barboza, quien se encontraba fugado desde hacía diez años de la Cárcel de Salto y estaba supuestamente involucrado en dos rapiñas en nuestra ciudad. El delincuente fue nuevamente procesado por rapiña, lesiones personales y amenazas, en tanto fue enviado a Salto para concluir su condena por el homicidio en 1995 de Ruperto Ruiz Solís, propietario de una casa de citas.
En el marco de las averiguaciones relacionadas a las dos rapiñas, la Dirección de Investigaciones allanó una finca ubicada a dos cuadras del Barrio Norte, paradero del “Pusuca”, de quien nada se sabía desde su fuga de Salto en 1997. Allí se incautó un cargador y una funda para una pistola calibre 7.65, arma de las mismas características que la utilizada en los referidos delitos. En esa oportunidad el dueño de casa (pareja de una familiar del “Pusuca”) dijo que estos elementos pertenecían a un arma de su propiedad que había extraviado durante una expedición al campo. La versión no resultó convincente y poco después los investigadores lograron establecer la verdadera procedencia del arma. Se trataba de un particular que, en el contexto de una transacción legal, la había puesto a la venta a través de los clasificados de EL TELEGRAFO. La Policía lo contactó y éste les dijo que efectivamente un hombre cuya descripción se ajustaba a la del “Pusuca” se presentó en su casa y le compró el arma, con cargador y funda, en 450 dólares.
Un sospechoso benefactor
La Policía comprobó que el dueño de la casa cercana a Barrio Norte mentía, así que volvió a interrogarlo y descubrió que el “Pusuca”, aun desocupado, les había literalmente amoblado la casa a nuevo. Entre otras cosas les regaló una heladera con freezer, una cocina de cuatro hornallas, un juego de comedor con seis sillas, un sommier, un rack y un ropero grande. Los investigadores insistieron en lo sospechoso de estas compras para un hombre sin trabajo, pero el indagado no aportó más datos y se intuyó que tenía miedo a declarar. Más tarde se estableció que en las últimas semanas “Pusuca” también adquirió al contado dos motos (una Honda 125 y una Kimco), las que puso a disposición del matrimonio y frecuentemente utilizaba para desplazarse. Todos estos elementos fueron confiscados por orden de la Justicia y posteriormente se allanó la pieza donde “Pusuca” vivía desde hacía al menos dos meses, contigua a la vivienda. Allí recuperaron un televisor de 29 pulgadas, un reproductor de DVD, una carpa canadiense, varios pares de zapatos y championes de elevado valor, así como numerosas prendas de vestir. Se trataba de artículos completamente nuevos, recientemente adquiridos al contado por el delincuente, lo que condujo a la presunción de que cometió más hurtos de los que en definitiva se le imputaron. Estos efectos también fueron incautados y los dueños de casa conducidos a la sede judicial, pero el magistrado no pudo establecer que fueran cómplices del “Pusuca” y fueron puestos en libertad.