Paysandú, Jueves 11 de Marzo de 2010
Locales | 07 Mar Los pueblos tienen los gobiernos que merecen
El actual gobierno es liderado por el tupamaro José Mujica, a quien alguno de sus seguidores definió así: “la figura de Mujica tiene un componente místico y trasciende todo lo normal de un político”, al que todo se le festeja incluso lo más vulgar, impropio de quien será nuestro presidente. Algunos empresarios, sobre todos los “snobs” porteños, caen “seducidos” a sus pies ante “este lobo con piel de cordero”.
Cuidado con el culto a la personalidad tan caro en los regímenes totalitarios. Ante esto participamos de la falta de unión de los demás partidos desde sus líderes hasta sus bases. Los hermanos serán unidos, es esa la ley primera. Somos distintos al Frente Amplio (FA) y eso no es menor ni será estigmatizante, debemos sentir orgullo de que somos distintos y no temer expresarlo.
Blancos, colorados e independientes de filosofías políticas liberales o socialdemócratas. Unámonos aunque ya desaprovechamos las próximas elecciones departamentales y le daremos más poder a la izquierda. Aprovechando la ley electoral las fuerzas de izquierda se unieron para lograr el poder. ¿Por qué no nosotros si son más las cosas que nos unen que las que nos separan? No olvidemos que luchamos contra el clientelismo más descamado que ha implementado gobierno alguno, comprando los votos ya no con trabajo público (que no está bien) sino medrando con sus necesidades básicas, incrementando el intocable partido de los inamovibles funcionarios públicos y de los cautivos intelectuales más conservadores que cualquiera, enquistados en la enseñanza entre otros lugares claves para moldear pensamientos a su antojo, desconociendo y desvirtuando la historia real. Las próximas elecciones municipales dejarán más intendencias en manos del FA por la miopía de nuestros dirigentes y empezará a existir más de una generación (como en Montevideo después de 20 años de “desastre” frenteamplista) que verá en el FA la única alternativa ya que no conoce otra cosa. En adelante deberá formarse una suerte de concertación en pro de lo que siempre fue nuestra República. Este gobierno, más todavía que los anteriores, sigue matando la clase media que es la que generó el mejor desempeño del país, por su cultura, esfuerzo, deseo y aspiraciones de superación, gasto de sus ahorros (cuando los podía generar) en el país y no en el extranjero. Esto no descarta ayudar a los pobres a instruirse y lograr trabajos genuinos y dignos, ni dar oportunidades de inversión al capital, que este gobierno “progresista” inteligentemente y contra lo que eran sus principios más caros, se ha encargado de mantener y acrecentar.
Cómo han desperdiciado estos muy buenos años de bonanza económica internacional cruciales para sentar las bases del desarrollo genuino. Iniciativas implementadas por los partidos tradicionales son la base de los logros de que se ufana este gobierno: terminales portuarias y aéreas en manos privadas, liberación del comercio agrícola, ley forestal y empresas afines, desmonopolización de los seguros, de las comunicaciones, apostar al trabajo e iniciativa privada nacional que sí la hay, permitir la inversión extranjera, tratados de libre comercio con quien quiera y no una producción cautiva y artificial, zonas francas, etcétera, todo con la oposición sistemática del FA y su apéndice el Pit-Cnt.
El FA está de moda sobre todo después del pan y circo que como en el decadente Imperio Romano calmaba las masas (no en balde tenemos el carnaval más largo del mundo, le ganamos por lejos a Brasil), y nuestro presidente añora a gente que trabaja poco y se divierte mucho como alguna tribu africana.
No se trata de unirse contra, como a mi juicio erróneamente explican algunos. Sí en favor y en pro del Uruguay de siempre. Chicos pero justos. Cumplidores con nuestras obligaciones y defensores de nuestros derechos. Con certeza jurídica, reconocimiento y apoyo a la propiedad y empresa privada. Asunción de riesgos, derechos y obligaciones personales no diluidos en nuestro Estado. Apertura al mundo y comercio con todos. Achicar la brecha social, algunos son más capaces, más tenaces, tienen más suerte, siempre tratar de acercar hacia arriba, nunca hacia abajo, no todos somos iguales. Defensores de los derechos de todos, no de minorías corporativistas o mayorías “desprotegidas”. Libertad en el orden y orden en la libertad. No a la anarquía, no a los guetos, no a “reírse de la justicia”, al contrario, profundizar la prevención y las leyes penales. Con un Estado que trace (no imponga) grandes líneas de desarrollo. Fiscalizador, haga sólo imprescindible, dejando a los privados el desarrollo de las mismas con la consiguiente creación de empleos realmente genuinos y movilidad laboral. No es Juan Pueblo el que debe tomar la iniciativa, son los actores políticos los que deben ser sensibles a la realidad, saber interpretarla y dejar sus “chacritas” para pensar en grande.
De otra forma tendremos gobiernos del FA para rato con las connotaciones de igualar para abajo, inseguridad, comercio y relaciones internacionales guiadas por afinidades ideológicas, incumplimiento de leyes, cambios de “reglas de juego”, sin corte de manos metidas en la lata, ni temblor de raíces de árboles. ¡Unámonos!
CI 2.837.857-0
LA VOZ DEL PÚBLICO
Quienes suscribimos, vecinos del barrio Amanecer, ubicado en las calles Solano García entre Instrucciones y Éxodo, queremos dar a conocer nuestra penosa situación de inseguridad. Nosotros, al igual que toda la población, sufrimos este letal flagelo, pero la situación se ve agravada ya que la cuadra no es vigilada por nadie, no es controlada por ningún agente u oficial de seguridad.
Entonces, los vecinos nos preguntamos si es nuestro barrio zona libre, ya que recurrimos y planteamos la situación a la policía y no obtuvimos ninguna respuesta. Inclusive, el planteo fue realizado en forma escrita y respaldado por la firma de todos los vecinos.
Hacemos pública esta situación, para ver si de alguna manera las autoridades competentes ponen fin a lo que estamos sufriendo.
Por los vecinos,
CI 3.155.614-5
SOLICITADA
La muerte no usa casco
“Aquellos vientos trajeron estas tempestades”.
Allá por el año 1989 un joven e impetuoso candidato a intendente en rueda de amigos en un comercio de Paysandú manifestó a unos motociclistas: “Si me votan les saco el casco”. Por las cosas de la vida y gracias a la Ley de Lemas fue electo intendente a pesar de no haber sido el más votado. Y cumplió su promesa. En el año 1991 se derogó la obligatoriedad del uso del casco protector en Paysandú, para algarabía de muchos jóvenes impetuosos e irresponsables motociclistas. Veníamos de dos o tres muertes por año desde 1985 a 1990, y a partir de esa fecha crecieron exponencialmente las muertes por no uso del casco a 14, 18, 15 y hasta 35 por año. Fueron 210 muertes en la década de ‛90 al año 2000, administración del Dr. Jorge Larrañaga; 210 familias que no recibieron ningún pésame de parte de quienes debían cuidar la vida humana y protegerla de lo que es el paragolpes de las motos: la cabeza.
Y no fueron solo vidas humanas perdidas, mayormente jóvenes, con la tristeza que ello genera. También algunos se salvaron después de algún accidente grave y les quedaron las secuelas, hechos unas “plantitas”. Además, el costo económico que carga toda la sociedad, no solo el transgresor, porque cada internación después de algún choque o accidente en un CTI cuesta el importe de 400 cascos de la mejor calidad, como lo explicó un director del Banco de Seguros. En esos casi 20 años que no fue obligatorio el uso del casco protector hubiera sido posible comprarles casco a los 33.000 motociclistas sanduceros con el ahorro de no usar los CTI. Nos gustaría que el ex intendente Larrañaga que quitó la obligatoriedad del casco, viendo los nefastos resultados y sin que sea un cargo de conciencia, patrocinara en su departamento una campaña recomendando su uso en bien de salvar vidas. Y esto es algo que toda la sociedad tiene en su debe. Las autoridades, los padres, los vecinos y familiares en cuidar lo más humano que tiene. Su juventud rebelde y sin el casco, con la velocidad, el escape libre y el alcohol tiene su precio y no es barato. Es la vida.
Pedro Oleynik Leschenko
C.I. 2.709.471-1
SOLICITADA
Nuestra perrita enfermó hasta el punto de quedar moribunda. Llevamos nuestra mascota a una clínica veterinaria que nos habían recomendado, “Mi mascota”, en calle Leandro Gómez entre Dr. De Herrera y Zorrilla. Nos dijeron que debíamos abonar una cantidad de dinero, que nos pareció mucho, y que la clínica no recibía animales enfermos.
Nos dirigimos a otra clínica del señor Nan, avenida República Argentina pegado al Híper Tata. El doctor Nan enseguida comenzó a atenderla, darle inyectables, y así la resucitó. Le pregunté cuánto nos saldría. Me respondió: “Vamos a tratar de salvarla primero”. Ese animalito comenzó a mejorar día a día, hasta volver a gozar de muy buena salud. Lo que me conmovió fue la manera como este profesional trata a los animales, que a todos llama por su nombre. Había otros animales que estaban operados, en recuperación, no podía creer que hubiera un hospital de animales tan bien instalado. Y con tanto cariño, allí se les prepara comidas especiales, según la dieta, pero reitero el cariño y cuidado que les da este profesional a los animales, que con él se encariñan, como nuestra perrita.
Edgardo Kolesnyk
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