Opinion | 14 Mar
El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo Brenta, considera necesario legislar para que se regularice la situación de ciertos nichos de actividad y personas que se dedican a determinadas formas de producción que sufren altas cargas impositivas y tienen dificultades para acceder a la seguridad social. Entre ellos están los autoempleados que prestan distintos servicios y muchas veces terminan en el informalismo ante la realidad antes descripta.
Según informó Ultimas Noticias, el Ministerio de Trabajo ve con buenos ojos la creación de la figura del “trabajador autónomo” como medio de regularizar a muchos trabajadores que desarrollan tareas pero que los mecanismos de aportación a la seguridad social actualmente existentes --tales como unipersonales y monotributo-- no les permite formalizarse.
Artesanos, artistas, diagramadores, dibujantes, redactores, fotógrafos, diseñadores, freelancers y teletrabajadores en general son sólo algunos de los trabajadores que tienen este problema.
Desde esferas ministeriales se indicó que es un hecho conocido que muchas de las personas que “quieren trabajar individualmente y tienen que facturarle servicio o producción de bienes a terceros pagan un muy alto porcentaje de impuestos”.
Ocurre que ciertos marcos jurídicos existentes, como el de empresa unipersonal, tienen un costo muy elevado para algunos trabajadores autónomos, lo que alienta la informalidad.
En tanto, el monotributo no es una opción para todos ya que por ejemplo, la prestación de servicios no está incluida, lo que deja fuera una buena parte de los trabajadores por cuenta propia.
El tema no es fácil, pero se impone tenerlo en cuenta a efectos de facilitar el acceso de estos uruguayos a los beneficios de la seguridad social. Seguramente habrá que estudiar algún tipo de solución “a medida” pero no es la primera vez que se hace, ya que hay otros sectores a los que se les ha creado régimenes específicos de aportes. Otro deber para la libreta de apuntes de las nuevas autoridades.