Locales | 15 Mar Tras descargar en Nueva Palmira la soja que transportan desde Paraguay, las cuatro barcazas que levantarán cebada malteada en el puerto de Paysandú llegarán esta semana a la terminal portuaria sanducera, siempre y cuando no se atrase el barco de ultramar que hará el trasbordo en aquel puerto, según surge de la información recogida por EL TELEGRAFO.
Como adelantáramos, tras un paréntesis obligado por la persistente crecida del río Uruguay que se dio a fines del año pasado, y que obligó a suspender la exportación de una segunda partida de cebada por la Hidrovía Paraguay-Paraná-Uruguay, la empresa AmBev ha decidido retomar esta logística con vistas a la salida en esta oportunidad de otras 4.000 toneladas de cebada malteada con destino a Brasil. Para ello se hará un viaje “redondo” de estas cuatro barcazas, desde que llegan y partirán con plena carga, para remontar los ríos Paraná y Paraguay tras descender por el río Uruguay, desde Paysandú hasta Puerto Ladario, en el extremo norte de la Hidrovía. Las barcazas que están llegando a Nueva Palmira, tras la descarga de la soja y el consecuente trasbordo a un buque de ultramar, serán sometidas a la inspección de rutina, tras el correspondiente lavado y desinfección para cumplir normas sanitarias, por lo que por ahora no es posible estimar una fecha de arribo a Paysandú. En los silos del puerto se han acopiado las cuatro mil toneladas de cebada procesadas en la planta sanducera, prontas para la exportación y a distribuirse en mil toneladas por barcaza, en esta oportunidad con la expectativa de acelerar significativamente la operativa respecto a la mecánica que se dio en el primer embarque. Precisamente los técnicos de AmBev y los operadores han estado “aceitando” los mecanismos para reducir el tiempo de carga, con correctivos en la flota de camiones y el uso de la cinta transportadora, desde que hubo dificultades en la boca de los camiones. A la vez en esa oportunidad el río atravesaba una fuerte crecida, y la altura de las barcazas amarradas a muelle fue una dificultad adicional para la agilidad de la carga.