Arq. Mauro Peroni, sanducero radicado en Francia

Locales | 14 Mar El arquitecto Mauro Peroni, sanducero radicado desde hace más de 39 años en Francia, quien obtuvo su título profesional en la nación europea, luego de los primeros estudios universitarios en nuestro país, presentó en esa oportunidad su tesis de proyecto de un hotel, parque, piscinas e infraestructura turística en la zona ubicada entre el obelisco y el Club Remeros, que luego presentó al Arq. Walter Belvisi, cuando éste estaba al frente de la Intendencia, sin la receptividad que esperaba, para encontrarse luego con que tomaba años después su idea, sin hacer referencia a su tesis y posterior planteo, según indicó.
Subrayó que esta iniciativa es plenamente vigente, pero se mostró extrañado porque pese a que ha ofrecido sus servicios para colaborar en las acciones para poder hacer realidad el emprendimiento, no encuentra eco para avanzar en la idea. No ocultó a la vez su decepción por el estancamiento que presenta Paysandú, donde a su juicio hay empresarios muy capaces y fuerzas vivas atentas, pero evaluó que hay una notoria falta de liderazgo y objetivos definidos, a la vez de ironizar que la actual administración municipal sí cumplió cuando dijo que no haría ninguna obra importante.
“Eso no le ha sido difícil de cumplir” sostuvo, en tanto evaluó que no percibe rumbos firmes en ninguna dirección en el gobierno departamental, lo que ha contribuido a que no se pudiera captar inversiones en diversas áreas y sectores vitales como el turismo, pese al potencial que tiene el departamento y la región. Señaló que evidentemente existen agudas carencias en infraestructura para ofrecer atractivos por ejemplo a la potencial corriente turística que tienen en la región grandes ciudades como Buenos Aires, entre otras.
En entrevista con EL TELEGRAFO durante la visita de unos diez días que realiza a Paysandú, Peroni desgranó conceptos en los que matizó críticas constructivas con propuestas y reflexiones para “cambiarle la pisada” a Paysandú y promover ámbitos de cooperación para encarar políticas de desarrollo departamental por lo alto, sin intereses políticos ni sectoriales, apuntando a coincidir para llevar adelante acciones de mediano y largo plazo, sin los cortoplacismos que condicionan severamente la eficacia y vuelo de las ideas.
Expuso Peroni que a sus 70 años piensa en volver a Paysandú, desde la ciudad de Salon de Provence, donde está radicado con su señora Marilyne Dhaynaut , de origen francés, a quien conoció en nuestra ciudad hace muchos años. Dijo que su intención es además contribuir en este proceso de desarrollo de Paysandú, si se considera que puede ser de utilidad, a la vez de recordar que ha trabajado ya en proyectos arquitectónicos en estos años, incluyendo la reforma del edificio de ACAC, preservando las líneas arquitectónicas originales donde había idea de construir un edificio nuevo, entre otros proyectos locales.
Estudios y tesis
Mauro Peroni nació en 18 de Julio y Vizconde de Mauá, donde luego instaló durante años un estudio fotográfico tras cursar tres años de arquitectura en Montevideo y a la vez encarar proyectos de construcción de muebles y decoración, para luego radicarse en Francia en 1971, y continuó su carrera para recibirse. Estudió en la Escuela de Arquitectura de Lille, donde se diplomó superando las dificultades iniciales del idioma, que luego pudo dominar perfectamente.
Para la tesis de diploma elaboró su proyecto para la zona costera de Paysandú, “porque leía siempre EL TELEGRAFO y estaba el problema crónico de que no había playas, por lo que decidí que lo mejor era hacer un parque fluvial, con una bahía para yates, piscinas calentadas con energía solar, cafetería, restaurante y del otro de lado de la bahía un hotel de 75 habitaciones, ubicado entre el obelisco y el Club Remeros, donde había un basurero”.
“Mi colega Belvisi fue el primero que tuvo conocimiento del proyecto, que se lo plantee en 1978, pero no hizo nada al respecto. Para situar el hotel, que es el objetivo principal, pensé en un sitio que justificara su instalación, y me embarqué en el proyecto del parque. Preví así tres edificios y el parque, para redondear el proyecto. En aquel momento al intendente no le mostré todo el proyecto porque era muy voluminoso y no lo había traído en ese momento, pero quedé a las órdenes y me dijo que no había plata, y lo dejó en un cajón. El proyecto fue presentado públicamente en dos oportunidades. Pero propone lo mismo 35 años después, olvidándose de aquel planteo, lo que me duele. Yo solo había presentado la idea, con la expectativa de ponerla sobre la mesa y discutirla y ver que se podía hacer. Mi visión era recuperar la zona para hacer un atractivo turístico para Paysandú y para los propios sanduceros, estimulando y hacer sentir a la gente orgullosa y mostrar las metas a las que se puede llegar”, analizó el entrevistado.
Mediocridad y
ESTancamiento
Pero en Paysandú “hay mucha decepción, hay una mediocridad que se ha extendido, frustración y estancamiento, lo que es una lástima, porque hay gente emprendedora, hay empresarios muy buenos, de mucho nivel, que conviven con otros que no tienen ningún interés. Entonces toda la población está como adaptada a una crisis, y hablando vulgarmente, para mí Paysandú, sin quererlo, se presenta como una ciudad en camiseta, es decir con posibilidades, pero que anda vestida en camineta, totalmente estancada. Tiene que ponerse la camisa y después tratarse de poner el traje”, para revertir este escenario negativo .
“Me ha molestado que haya presentado el proyecto del parque y hotel y lo ignoraran, hubiera preferido tener críticas a ser totalmente ignorado. He querido colaborar y hacer un trabajo distinto, previendo incluso del otro lado de la avenida crear una zona de viviendas bioclimáticas, es decir un edificio con autoabastecimiento energético, con energía solar, determinados materiales aislantes, lo que lo valora y estimula a la gente a mejorar el medio ambiente”, explicó.
“Hay abandono, enormes espacios abandonados y es fundamental hacer algo aprovechable. Lamentablemente no se ha sido receptivo a mi idea”, acotó, para ampliar que en esa zona costera se podría incorporar un parque acuático, como tiene Salto, “que puede funcionar durante gran parte del año, agregado a un hotel bioclimático y piscinas calentadas con agua solar, como señalaba en el proyecto, lo que sería un gran atractivo para Paysandú. Esperaba que la propuesta fuera recibida y se le formularan críticas y eventualmente reestructurarla, mejorarla, pero ha sido ignorada”.
Urbanismo
Acerca del aspecto urbanístico de la ciudad, dijo el arquitecto Peroni que debería encararse en general un trabajo distinto ante notorias desprolijidades en pavimentación, a la vez de señalar la necesidad de plantar árboles adecuados en avenidas y otros espacios. Precisó que pese a que existen oficinas que se encargan específicamente de esta área en la Intendencia, “el resultado ha sido malo” y evaluó que no se innova, salvo algunas en zonas aisladas, y consideró que incluso se nota la falta de jardines y flores en la mayoría de las áreas públicas de la ciudad.
Dijo que se ha ignorado en este sentido además ideas como las lanzadas en su momento por algún profesional como el Ing. Ricardo Brasesco, y señaló que lo que se proclama acerca “ de la participación y democracia no se cumple, con profesionales que están muy quietos y cómodos en sus cargos. A la democracia no solo hay que mencionarla, sino practicarla, siendo también abierto y escuchando como prueba de inteligencia”.
“El gobierno municipal ha dicho antes de entrar que no esperara de él ninguna obra y ha cumplido. No ha hecho ninguna obra, y después se quejan. Las promesas de hacer no se cumplen, pero sí las promesas de no hacer, lo que por supuesto es más fácil, y luego se lamentan de que los jóvenes se van porque no tienen perspectiva y no ven que se vaya avanzando hacia algún lado para tener algún futuro”, reflexionó.
Energía con biodigestores
En otro orden, el arquitecto Mauro Peroni consideró que sería muy positivo utilizar biodigestores para aprovechar desechos orgánicos de diversa naturaleza, que permiten que en unos quince días fermenten esos residuos y se genere gas metano, además de quedar como desecho abono de primera calidad, como se hace en Francia y otros países europeos.
Destacó que ello se puede hacer en una ciudad, en una granja o cualquier otro lugar donde se genere un buen volumen de residuos. Señaló que en Francia hay fábricas de biodigestores y que en su momento invitó al intendente Julio Pintos, cuando éste se disponía a viajar a Marsella, indicándole por correo electrónico que estaba dispuesto a ir a recogerlo en esa ciudad para llevarlo a recorrer la fábrica de biodigestores, para evaluar la posibilidad de encarar o promover alguna experiencia de este tipo Paysandú. “Pero nunca me contestó el correo con la invitación, que la hacía sin ningún interés de naturaleza económica o particular, sino para hacer ago positivo. Estos equipos redundan en beneficios al economizar divisas y crear fuentes de trabajo, incluso pudiendo utilizarse en flota de taxis y ómnibus en lugar de motores a gasoil, con beneficio para el medio ambiente”.
Subrayó que se trata de una producción mucho más eficiente que extraer el metano de los basureros, porque se obtiene un gran rendimiento y se hace en quince días en lugar de esperar años a que se forme por naturaleza un determinado volumen aprovechable de metano. “Esto es desestimulante, porque se quiere colaborar y se le ignora a quien formula inquietudes y propuestas”, sostuvo Peroni, en tanto evaluó que igualmente “hay algunos emprendimientos buenos en Paysandú pero no hay efecto de contagio”.
Semipeatonal en el centro
Por otro lado, en el área urbanística, reflexionó que el centro de Paysandú y sobre todo 18 de Julio “es un caos total” y consideró que no debería permitirse el estacionamiento en esa arteria, donde hay “una falta de respeto total a la arquitectura”, y “una pelea por quien instale el cartel más grande”. Evaluó que a su juicio lo más conveniente sería incorporar una semipeatonal o una peatonal, duplicando el ancho de la vereda, para dotar de otros atractivos al lugar.
Puertos
Otros planteos formulados por Peroni, entre muchos otros que escapan a la posibilidad de este espacio periodístico, refieren a su visión crítica sobre las acciones por recuperar el puerto de la ciudad de Paysandú, “que es además inundable, y yo creo que el puerto debería estar ubicado en Casa Blanca, que tiene otras perspectivas mucho más acordes a las necesidades. Un puerto deportivo con anexo de actividades de esparcimiento, y exposiciones sería mucho más dinamizador y atractivo para una ciudad ‘turística’ ya que se sumaría a la actividad portuaria ejercida en un lugar más apropiado y sobre todo de futuro”.
A la vez, cuestionó el perfil de las obras que se están encarando por el gobierno en el barrio Curupí, sector hacia donde precisamente debería extenderse la zona de playas y un área residencial de otras características, entre otras acciones.