Locales | 17 Mar “La particularidad que se dio en el anterior período de gobierno es que se institucionaliza el Comité de Emergencias, primero ante el fortalecimiento del Sistema Nacional de Emergencias en una unidad específica dentro de Presidencia de la República que conforma por decreto presidencial a los comités de emergencias y luego por la ley del Sistema Nacional que establece las competencias y atribuciones”, destacó ante los ediles la intendenta Helena Heinzen.
Admitió que esto “es muy importante porque nos ha permitido dar un salto en calidad en lo que tiene que ver con las capacidades y las aportaciones de los comités de emergencia, pero sobre todo en cuanto a las coordinaciones. Nosotros sabemos que antes las emergencias se enfrentaban en forma aislada por cada organismo -añadió- sin que hubiera una coordinación y potencialización de fuerzas de cada uno de ellos. También se debe destacar que el crear un Comité de Emergencia con esta estatura institucional ha generado tener espacios de capacitación específica y sobre todo de fortalecimiento de la infraestructura. Quiero ser bien precisa en cuanto a que no debemos confundir lo que es el Comité Departamental de Emergencias con lo que llamamos ahora Cecoed, que es el Centro Coordinador de Emergencias. Este centro es simplemente una herramienta, que será mejor o peor usada según las capacidades del Comité de Emergencias, que ha dado Presidencia de la República a través de un convenio con el Comando Sur y dotara a la mayoría de los departamentos de un lugar donde se pudiera coordinar, registrar, las emergencias y sistematizar los datos y acciones que se dan desde allí. Esto permite ‘gestionar’ el riesgo de otra manera y prevenir futuras emergencias, lo que es nuevo en nuestro departamento también en el país. No existían registros de ningún tipo sobre la forma en que se encaraban las emergencias en tiempos anteriores, ni sobre los damnificados y sus características, lo que por suerte podemos decir ahora que el Cecoed cumple la función de registrar, analizar, valorar y proyectarnos ante posibles nuevas emergencias. A esto tendremos que acostumbrarnos en el marco del cambio climático, porque es una estrategia de acción que Presidencia de la República ha tenido, respecto a cómo enfrentar las variabilidades del clima y las inclemencias en general, en lo que nos hemos apoyado los gobiernos departamentales”.
Tener conciencia
del problema
Tras describir los detalles de una fotografía aérea de la ciudad, poco antes del pico máximo de inundación -9,07 metros- dijo “esto lo muestro porque es fundamental tener conciencia de la magnitud del problema. No fue una emergencia menor, de la que estuviéramos acostumbrados y decíamos que el Centro Coordinador de Emergencias tuvo su bautismo ‘de agua’ y no ‘de fuego’, como decíamos con el jefe del Destacamento de Bomberos, porque se inauguró quince días antes de que se produjera esto. Lo que implicó más de 145 manzanas bajo agua, 5.799 personas damnificadas (evacuadas) lo que es igual a cinco mil setecientos noventa y nueve dramas, situaciones individuales que estuvieron sometidos a estres y, de alguna manera, todas ellas han desarrollado mecanismos de supervivencia así como también para adecuarse a las reacciones de una comunidad conmovida por esto.
Acá nadie quedó ajeno -eso lo sabemos- a que 5.799 personas fueron afectadas por el agua, no podemos decir que en Paysandú hubiera alguien que no supiera lo que estaba pasando y no se sintiera conmovido por ello”.
“Digo esto -sostuvo Heinzen- porque hay que ver la magnitud del problema para poder medir el significado de la respuesta. Porque muchas veces podemos quedar centrados en el problema individual y seguramente que la respuesta parezca insuficiente, pero cuando decimos que tenemos una comunidad conmovida por 5.799 personas que han sido golpeadas de esta manera, se tiene que relativizar el problema individual y adquirir conciencia de lo colectivo. Poder ver que el drama personal, que es muy legítimo y válido, puede ser quizá no tan importante como el que tengo al lado, lo colectivo en esto es muy importante y soluciones individuales en este tipo de problemas no existen”.
No hubo discriminación
Por su parte el ex jefe del Destacamento de Bomberos, Walter Pérez, a quien la intendenta Heinzen cedió la palabra, dijo que si bien “hubo autoevacuados, evacuados por el Comité de Emergencia y evacuados en carpas, no se discriminó a nadie. Al pedirles (a los que estaban acampados) que se fueran del lugar, el argumento que manejaban era que si lo hacían les iban a robar lo poco que tenían”. Más adelante sostuvo que “se trabajó para adelante, para ganarle al río.
Un detalle no menor: en todo este proceso no hubo que lamentar un solo muerto y ello ocurrió, a mi entender, porque se trabajó sobre el terreno, en el que Prefectura de Puerto jugó un papel muy importante en varias ocasiones”.