Deportes | 29 Mar El reciente rechazo al proyecto de una Liga Nacional de Selecciones de básquetbol, donde Paysandú y Salto tomaron la bandera y se bajaron, mientras que Sorinao espera la comunicación relativa a las reformas que al mismo le introdujo el presidente de las Ligas del Interior, Sergio Picasso, trajo nuevamente a la palestra el tan manido tema del desconocimiento que en ocasiones -y ya han sido muchas a lo largo de la historia- hace gala la FUBB con el básquetbol del Interior, sus instituciones y su carácter de permanente surtidor de jugadores para los equipos capitalinos.
El mismo desconocimiento mostrado en su momento con la OBL (Organización del Básquetbol del Litoral), hoy día sustituída por la CBL, y con la ausencia de la Liga de Río Negro desafiliada actualmente de la FUBB, precisamente.
Entre los argumentos fundamentales marcados por las Ligas de Paysandú y Salto, está precisamente señalado el desconocimiento mostrado por quienes presentaron el proyecto, en cuanto a fechas, actividad interna de las Ligas participantes y otros detalles.
Atención, el intento de jugar una Liga de Selecciones es válido, como lo es y además importante, la sponsorización del certamen.
Simplemente que habrá que canalizarlo de otra forma, buscando que efectivamente todos puedan participar, más allá de que en algunos departamentos no existen Liga ni equipos que los puedan representar. Pero nuestra intención apunta a otra cosa.
Pues bien.
Si en el Litoral hablamos de desconocimiento para con una zona del país, la única realmente vigente en materia de básquetbol a través del historial de este deporte en nuestro país, lo primero que habrá que hacer es volver a dotar a la antigua OBL, hoy CBL, de dinamismo, ideas. Hoy como grupo prácticamente no existe. Salto y Paysandú hace un par de años que transitan juntos, jugando certámenes Integración, el cual por este año parece que quedará en el debe.
Desde hace años no se disputan los torneos se selecciones, y últimamente ni siquiera a nivel de formativas.
Se reflotó si a nivel de clubes, el certamen de campeones del Litoral unido al del Interior.
Entonces se nos ocurre, que es menester que las tres Ligas que permanecen integrando la CBL, deben juntarse en serio, armar sus torneos, actuar con espíritu de cuerpo, precisamente para contrarrestar eso que se expresa, es un desconocimiento hacia el básquetbol del Litoral. “Chapatín”