Nacionales | 01 Abr Con esa plata, haría milagros
Mientras en el Interior el debate sigue haciéndose esperar, la pugna por la Intendencia de Montevideo sigue generando controversias, en tanto los candidatos redoblan la apuesta a fin de obtener un mínimo de ventaja sobre sus contendientes. Una de las aspirantes a la comuna capitalina, la nacionalista Ana Lía Piñeyrúa, disparó gruesa munición contra la administración frenteamplista de Montevideo, tildándola de ineficiente y mala administradora. En su columna de “Montevideo Portal”, la ex ministra dijo que si la Intendencia destinara a la construcción de calles todo el dinero que se pierde por “la ineficiencia” se podrían construir 70 kilómetros de vías de tránsito “que se podrían hacer en un año y que tanto se necesitan, o duplicar el número de cruces con semáforos que actualmente existen”. La candidata dijo haber analizado los números del Ejecutivo departamental en materia de pago de sueldos, gastos de funcionamiento e inversiones, comparándolos con las comunas del Interior, lo que dio como resultado que la comuna capitalina destina el 50% de su presupuesto al pago de sueldos, mientras que en el Interior el promedio de de 43%. En gastos de funcionamiento -añadió- las intendencias del Interior gastan en promedio un 25% de su presupuesto, en tanto en Montevideo se destina un 35%. “Es posible verificar, entonces, que la gestión de la Intendencia de Montevideo está, en todos los indicadores seleccionados, peor que la media de sus colegas del Interior”, afirmó Piñeyrúa y agregó que la “ineficiencia” de la comuna es “grave” y “repercute en un deterioro de los recursos asignados e inversiones”.
“Los montevideanos, ¿no nos merecemos esto merced a una mejor administración que lleve la inversión a casi un 30% del presupuesto municipal, como se hace en el Interior?”, preguntó.
Regresa el tema Cuba
Muchos pensaban que el tema estaba enterrado, pero es evidente que la oposición no está dispuesta a dar el brazo a torcer y demandará nuevamente una declaración de condena al régimen cubano, al tiempo que otro disidente, Guillermo Fariñas, se mantiene en huelga de hambre desde el 24 de febrero. Según informó “El País”, uno de los principales impulsores de una declaración de repudio hacia el régimen, el senador Luis Alberto Lacalle, se comunicó con la madre de Fariñas para preocuparse por el estado de salud del disidente y comprometerse a efectuar nuevas gestiones para que el gobierno uruguayo respalde a su hijo. La señora Alicia Fernández reveló a Lacalle que su hijo permanece en estado de semiconsciencia y luchando por superar una infección, pero es necesario esperar 48 horas más para efectuarle nuevos análisis.
Lacalle se compadeció con la situación de Fariñas y adelantó que la próxima semana la oposición hará un nuevo intento por aprobar una declaración “al menos desde el punto de vista humanitario”. “Tratamos que el Poder Legislativo apruebe una declaración de apoyo a la actitud de su hijo porque sabemos que es a favor de los derechos humanos. Ha llegado la hora de que de una vez por todas se diga la verdad sobre lo que ocurre en Cuba”, le dijo el senador y agregó que todos quienes aman la libertad insistirán “para que se deje sin efecto a prisión de quienes están detenidos por libertad de expresión y por querer una Cuba más democrática y más libre”.
“Burrada científica”
El gobierno intenta dar señales claras respecto a la lucha contra el narcotráfico y el consumo problemático de drogas, pero algunos legisladores oficialistas parecen “pasados de rosca” y dispuestos a promover estrategias que persiguen la rehabilitación “a prepo” de quienes han caído en las redes de la droga. Según trascendió, el diputado del MPP Víctor Semproni promoverá un proyecto de ley que prevé la internación compulsiva de los adictos a través de una orden judicial y como estrategia de rehabilitación. Alarmado por la propuesta, el director de la Junta Nacional de Drogas, Milton Romani, dijo que ese modelo de tratamiento representa “una burrada científica”. En una entrevista cedida a ‘La República’, Romani dijo que la compulsión al tratamiento “no tiene en cuenta una conclusión básica” y es que la adicción “no es un tema de voluntad, ni de cansancio, sino de un conjunto de elementos neurobiológicos que no se puede tratar ‘a prepo’”. Insistió en que este tipo de estrategias representan “una burrada” y reclamó una discusión “con calma” del problema. “Me parece un poco absurdo someter (al joven) a un proceso judicial porque se resiste a tratarse. Me parece que es alargar el problema, judicializar, entorpecer”, añadió Romani y adelantó que conversará con el presidente Mujica respecto a la propuesta de Semproni, ya que lo propuesto por el mandatario al inicio de su gestión estaría en sintonía con la iniciativa. No obstante, aclaró que lo de Mujica fue un llamado a la reflexión, mientras que Semproni tiene un proyecto ya articulado para cuya redacción “no consultó a nadie”.