Presidente del SUL

Rurales | 29 Abr El presidente del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), ingeniero agrónomo Gerardo García Pintos, señaló a EL TELEGRAFO que “la gente tiene que apretar a sus autoridades locales, porque los problemas de abigeato deben resolverlo cada uno en su zona”.
Uno de los graves problemas que hoy enfrenta el criador de lanares en Uruguay, es el constante robo de animales, permanentemente denunciado por los mismos, pero sin el éxito buscado en el resultado final.
Para el titular de la principal institución lanera del país, “debe haber voluntad política de apretar o no apretar. Cada uno en su pago sabe en donde hay que apretar para que se haga cumplir la Ley”.
Sostiene que desde el SUL “hacemos lo que podemos hacer. Nosotros podemos colaborar a nivel nacional y estamos a la orden para lo que podamos hacer”.
“Esto vale para cualquier zona del país”, enfatizó. “Todos tenemos, de alguna forma, nuestra manera de llegar a las autoridades, como ser diputados del departamento, jefes de policía o los propios comisarios, denunciando las cosas”.
Manifestó que “de nada sirve decir que faltan ovejas pero no denunciarlo y hacer nada. Esto no se arregla solicitándole soluciones al ministro del Interior en Montevideo o pidiéndole al SUL en forma general, sino que es una tarea de todos”.
Entiende que una sociedad madura “no lo debe permitir. Hay cosas que son sí o no, y no hay grises. En este caso el tema abigeato es un no rotundo y la sociedad no debe permitir que exista”.
A medias
García Pintos llamó personalmente el año pasado a un productor de la zona de Guichón, que denunció a EL TELEGRAFO la grave pérdida de cientos cabezas de ovinos a causa de los contínuos robos en su establecimiento.
Meses después, el propio productor mencionó que luego que intercediera García Pintos ante las autoridades locales, volvió la calma a la zona. Pero a fines de enero y en una feria ganadera en el local de la Liga del Trabajo de Guichón, este productor adquirió una majada para mejorar el stock ovino de su campo.
A partir de ese momento, los amigos de lo ajeno no dudaron en volver a visitarlo y hasta hoy el abigeato volvió a estar presente en el establecimiento de este productor, que observó como la solución fue a medias.
Aún así, destacó la labor del presidente del SUL, quien se mostró desde un primer momento preocupado por la situación.